Roja, verde o amarilla: está es la manzana que debes incluir en tu desayuno después de los 40 años para sentirte mejor
Después de cierta edad, elegir qué comer se convierte en una decisión fundamental para mantener un cuerpo fuerte y sano.
Después de los 40 años, el metabolismo tiende a volverse más lento, la masa muscular puede reducirse y el riesgo de enfermedades crónicas aumenta. Por lo tanto, la elección de alimentos adecuados se vuelve clave para mantener el cuerpo saludable.
Las manzanas son una excelente opción para el desayuno, ya que ofrecen una gran cantidad de fibra, vitaminas y antioxidantes, componentes fundamentales para una dieta equilibrada.
No obstante, es importante elegir la variedad correcta para notar la diferencia.
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Manzana roja, verde o amarilla: ¿cuál es la mejor opción después de los 40?
A medida que avanzamos hacia los 40 años, mantener una dieta equilibrada es esencial para cuidar el organismo. En este sentido, las manzanas rojas aparecen como una excelente opción.
Estas manzanas son una fuente rica en fibra soluble, la cual no solo facilita la regularidad intestinal y previene el estreñimiento, sino que también optimiza la absorción de nutrientes.
Además, su contenido de antioxidantes permite combatir los radicales libres, protegiendo las células del envejecimiento prematuro y fortalecimiento el sistema inmunológico.
Asimismo, su capacidad para reducir los niveles de colesterol LDL en sangre, debido a la pectina que contienen, ayuda a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, promoviendo una buena salud cardiovascular en la edad adulta.
Otro aspecto relevante es su contenido de potasio, un mineral esencial para la regulación de la presión arterial.
Cabe señalar que, aunque las manzanas rojas son una opción muy beneficiosa, presentan un contenido ligeramente mayor de azúcares naturales en comparación con otras variedades.
Cómo incluir manzana roja a tu dieta
Incorporar manzana roja a tu dieta es una excelente manera de aprovechar sus múltiples beneficios para la salud.
A continuación, te presentamos algunas ideas para incluirla fácilmente en tu rutina diaria.
Crudas
- En ensaladas. Las manzanas rojas añaden un toque dulce y crujiente a las ensaladas. Combínalas con verduras de hoja verde, nueces, queso y un aderezo ligero para una comida completa y saludable.
- Con granola. Agrega trozos de manzana roja a tu granola casera o comprada para un desayuno rico en fibra y sabor.
Cocidas
- Asadas. Asar las manzanas realza su sabor dulce y las vuelve aún más suaves. Puedes asarlas enteras o en rodajas, espolvoreadas con canela o especias a tu gusto. Son perfectas como postre o acompañamiento de carnes o quesos.
- En compota. La compota de manzana es una forma deliciosa y versátil de consumir esta fruta. Puedes prepararla con manzanas peladas o sin pelar, agregando azúcar, canela y especias.
- En puré. El puré de manzana es una excelente opción para bebés y niños pequeños. Puedes prepararlo cociendo las manzanas y luego licuándolas hasta obtener una textura suave.
En bebidas
- Jugos y licuados. Las manzanas rojas son perfectas para preparar jugos y licuados naturales. Puedes combinarlas con otras frutas, verduras o yogur.
- Infusiones. Puedes agregar rodajas de manzana roja a tus infusiones favoritas para darles un toque de sabor dulce y afrutado.
En postres
- Tartas y pasteles. Las manzanas rojas son un ingrediente clásico en tartas y pasteles. Su sabor dulce y ácido combina perfectamente con masas y especias como la canela, la nuez moscada y el jengibre.
- Galletas y muffins. Puedes agregar puré de manzana o trozos de manzana a tus recetas de galletas y muffins para obtener un postre más húmedo y sabroso.
- Helados. Las manzanas rojas se pueden usar para preparar helados caseros deliciosos y refrescantes.