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La leche, es sin duda, una de las fuentes de calcio más conocidas y consumidas a nivel mundial. Sin embargo, es importante reconocer que existen otras opciones que pueden ser incluso mejor.
Un claro ejemplo de esto es la moringa, un árbol originario del norte de la India, que se conoce comúnmente como "árbol de la vida".
Este superalimento no solo iguala la cantidad de calcio que se encuentra en un vaso de leche, sino que además aporta una gran cantidad de hierro y vitaminas, convirtiéndolo en un aliado excepcional para fortalecer el sistema inmunológico.
El "árbol milagroso" que fortalece tu sistema inmunológico
La moringa es un árbol originario del sur de Asia que ganó popularidad en los últimos años. Entre sus cualidades más destacadas se encuentra su capacidad para fortalecer el sistema inmunológico.
En primer lugar, es una fuente excepcional de vitaminas y minerales, fundamentales para el funcionamiento de nuestro organismo. No solo contiene vitaminas A,C,E,B6, así como ácido fólico, potasio, calcio, hierro y zinc.
Además, es rica en antioxidantes, como flavonoides y polifenoles, que combaten los radicales libres y protegen las células del daño oxidativo.
Por último, ciertos estudios sugieren que la moringa puede estimular la producción de glóbulos blancos, células responsables de combatir las infecciones.
¿La moringa ayuda a bajar de peso?
Los estudios científicos han demostrado que el extracto de moringa puede ser eficaz para controlar el aumento de peso en ratones. Su alto contenido de vitamina B potencia el proceso de digestión y ayuda a nuestro organismo a convertir aquello que consumimos en energía, en lugar de guardarlos en forma de grasa.
Se considera que tiene las siguientes propiedades:
- Reducir el aumento de peso.
- Ayudar a reducir el colesterol y la presión arterial.
- Prevenir la inflamación.
- Ayudar al cuerpo a convertir las grasas en energía.
- Reducir la fatiga y mejorar los niveles de energía.
Contraindicaciones de la moringa
Si bien en general está opción no presenta contraindicaciones, hay que tener en cuenta ciertos efectos secundarios:
- En grandes dosis puede tener propiedades laxantes.
- En las mujeres embarazadas puede provocar contracciones uterinas.
- Del mismo modo, las mujeres en periodo de lactancia deben evitar las hojas de Moringa, ya que se desconoce si alguna de las sustancias químicas presentes puede pasar a través de la leche.
- Se recomienda que las personas que toman anticoagulantes también eviten la moringa, a menos que consulten primero a su médico.
