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El Servicio de Administración Tributaria (SAT) cuenta con la facultad de auditar las cuentas bancarias de los contribuyentes en México para combatir la evasión fiscal y el lavado de dinero. Cuando el organismo detecta inconsistencias significativas entre los movimientos financieros y los ingresos declarados, puede tomar medidas drásticas, como el congelamiento de fondos y la retención de dinero.

Esta es una medida severa que se aplica tanto a personas físicas como a personas morales que realicen operaciones consideradas irregulares por la autoridad fiscal. La intervención no es aleatoria; es el resultado de un exhaustivo proceso de auditoría en el que el SAT evalúa los movimientos, ingresos y egresos de un contribuyente para determinar si su situación fiscal es legal. De confirmarse una deuda, se puede proceder al cierre temporal de cuentas y al bloqueo de fondos.

Por qué el SAT puede congelar una cuenta bancaria

El SAT monitorea constantemente los movimientos bancarios para identificar discrepancias o irregularidades que puedan ser indicativas de delitos fiscales. Si se confirman actividades ilegales, el contribuyente puede enfrentar elevadas multas y la obligación de regularizar su situación.

El congelamiento de cuentas bancarias se activa, principalmente, por las siguientes cinco situaciones:

  1. Falta de pago de impuestos: Cuando un contribuyente no cumple con sus obligaciones fiscales dentro del plazo establecido por la ley.
  2. Omisión en declaraciones: La no presentación de las declaraciones de impuestos, ya sean mensuales o anuales, es una causa directa de sanción.
  3. Deudas sin garantía: No interponer medios de defensa cuando se tiene un crédito fiscal firme o no ofrecer una garantía suficiente para cubrir el monto de la deuda.
  4. Irregularidades en la declaración de ingresos: Cuando los movimientos bancarios de una persona no coinciden con los ingresos que ha declarado oficialmente ante el fisco.
  5. Simulación fiscal: El uso de facturas falsas o la simulación de operaciones y actividades inexistentes para evadir impuestos.

¿Qué sucede cuando la cuenta bancaria es congelada?

Quien incurra en alguna de estas situaciones, el SAT tiene la potestad de ordenar el congelamiento de fondos bancarios. Esto significa que el contribuyente afectado no podrá realizar ningún tipo de movimiento en la cuenta, incluyendo transferencias, depósitos o retiros de efectivo, ya sea en ventanilla o en cajeros automáticos. La cuenta queda inactiva hasta que la situación se regularice.

Para informar al contribuyente sobre el bloqueo de su cuenta, el SAT utiliza varios métodos. La vía principal de notificación es el Buzón Tributario o el correo electrónico registrado. En algunos casos, un funcionario del SAT puede entregar el aviso personalmente en el domicilio fiscal del contribuyente. Si no se encuentra al titular, el aviso se hará público a través de los estrados digitales, que son publicaciones oficiales.

Una vez que el SAT emite la orden de bloqueo, el organismo instruye a los bancos para que restrinjan el acceso a los fondos del deudor. La cantidad que se retiene es el valor total de la deuda fiscal, que incluye no solo los impuestos originales, sino también multas, recargos y gastos de ejecución. El banco no puede liberar el dinero sin la autorización expresa del SAT.

¿Cómo liberar la cuenta bancaria?

La única forma de desbloquear la cuenta es que el contribuyente regularice su situación con el fisco. Esto implica el pago total del monto adeudado o la presentación de una garantía aceptable por el SAT, como una fianza o la hipoteca de un bien inmueble. Hasta que se cumplan estas condiciones, los fondos permanecerán inaccesibles para el usuario.