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Una investigación reciente sugiere que la primera pirámide construida por los humanos podría encontrarse en Indonesia. Esta hipótesis fue presentada por los investigadores en un artículo publicado en la revista Archaeological Prospection. Según lo expuesto, el monumento conocido como Gunung Padang podría haberse erigido hace aproximadamente 25 mil años.
Los científicos habían sostenido durante años que las primeras pirámides construidas por la humanidad se localizaban en Egipto. Sin embargo, nuevos datos arqueológicos han revelado que estas no fueron, en realidad, las primeras pirámides construidas por el hombre.
De acuerdo con estudios realizados entre 2011 y 2014, que emplearon un enfoque integral combinando métodos arqueológicos, geológicos y geofísicos, se ha desvelado una realidad mucho más compleja bajo la superficie. Estas investigaciones indican que Gunung Padang no es meramente un conjunto de terrazas prehistóricas, sino una sofisticada construcción subterránea que alberga grandes cámaras y cavidades.

La verdadera fecha de construcción de la pirámide
Las estimaciones sobre la antigüedad de esta estructura megalítica oscilan entre los años 25.000 y 14.000 a.C. A través de técnicas de datación por radiocarbono, los científicos han determinado que su verdadera antigüedad se remonta a miles de años antes de nuestra era, incluso hasta el Paleolítico. Esta construcción, ubicada a más de 30 metros de profundidad, ha sido fechada entre 16.000 y 27.000 años atrás, durante la última Edad del Hielo.
Un aspecto notable de esta edificación es su magnitud y complejidad. Se estima que su construcción se llevó a cabo en etapas sofisticadas, lo que evidencia un nivel de técnica arquitectónica que supera las capacidades previamente atribuidas a las sociedades cazadoras-recolectoras.
Para comprender mejor quiénes fueron estos pueblos prehistóricos y las razones detrás de la edificación de tales estructuras, se requieren más excavaciones. Durante la investigación, los científicos utilizaron ondas sísmicas para explorar el interior de la ladera, descubriendo indicios de cavidades y cámaras ocultas, algunas de las cuales alcanzan hasta 15 metros de longitud y 10 metros de altura.














