Científicos de la Universidad de Texas han descubierto que la actividad insuficiente de la telomerasa, derivada de la transcripción del gen de la transcriptasa inversa de la telomerasa baja(TERT) es capaz de revertir ciertas características del envejecimiento.
El artículo, publicado en Cell, demostró que esta molécula reduce la inflamación relacionada con la edad, aumenta los factores neurotróficos y preserva la función cognitiva sin toxicidad evidente.
Telómeros: la clave para retrasar el envejecimiento
Los telómeros son las tapas protectoras en los extremos de nuestros cromosomas. Estos se acortan con cada división celular, y cuando se vuelven demasiado cortos, la célula ya no puede dividirse y muere. Este proceso se relaciona directamente con el envejecimiento.
Los científicos han identificado la telomerasa como una enzima crucialpara mantener la longitud de los telómeros. Sin embargo, su actividad tiende a disminuir con la edad.
No obstante, se ha descubierto un nuevo compuesto denominado TAC(compuesto activador de la telomerasa), que ha mostrado la capacidad de aumentar la actividad de la telomerasa.
De hecho, estudios científicos realizados en ratones han revelado los beneficios potenciales del TAC:
- Alargamiento de los telómeros, manteniendo la capacidad replicativa de las células.
- Reducción de la senescencia celular, que permite mantener la funcionalidad de los tejidos por más tiempo.
- Disminución de la inflamación.
- Mejora de la función cognitiva.
- Protección contra enfermedades relacionadas con la edad.
Estos resultados sugieren que el TAC podría usarse como tratamiento para prevenir enfermedades relacionadas con la edad, como el Alzheimer y el Parkinson.
Un escudo contra los cromosomas
De acuerdo con un artículo publicado en Live Science, los investigadores buscaron aumentar la cantidad de esta proteína, que normalmente disminuye con la edad.
De hecho, la transcripción del gen de la transcriptasa inversa de la telomerasa baja (TERT) funciona como una máquina que extiende la longitud de los telómeros, que funcionan como "tapas protectoras" para evitar que se deshilachen los extremos de los cromosomas.
El acortamiento de los telómeros se produce con el avance de la edad, cuando las etiquetas químicas se acumulan en nuestros cromosomas, generando lo que se conoce como cambios epigenéticos. Algunos de estos cambios desactivan en el gen del TERT, derivando en que las células produzcan menos proteína.
La molécula que detiene el envejecimiento
Los científicos identificaron una pequeña molécula, conocida como el "santo grial" de la ciencia, que puede reactivar la producción de la proteína TERT.
Cuando se incorporó en la maquinaria celular, presentó cambios positivos en cuanto a la fuerza muscular, reducción de la inflamación y el crecimiento de las células cerebrales.
Hasta el momento, la molécula antienvejecimiento se probó únicamente en roedores y en moléculas humanas en placas de laboratorio, pero los investigadores aseguran que los resultados son los suficientemente convincentes como para pasar a la fase de ensayos con el compuesto en humanos.