El país que casi nadie conoce pero tiene una de las mayores reservas del recurso natural que buscan las potencias mundiales
Un país de Asia descubrió un importante yacimiento repleto de diversos recursos naturales que son claves para todas las industrias.
Los recursos naturales son clave para el desarrollo de todas las industrias modernas. Más allá de ciertos recursos relacionados con la energía, como el petróleo o el gas, existe una familia de recursos conocidos como "tierras raras" que tienen un impacto considerable en las industrias de alta tecnología.
Estamos hablando de elementos químicos como tales como el lantano, cerio, praseodimio, neodimio y prometio entre otros. Estos elementos tienen aplicaciones en los procesos de fabricación de imanes, dispositivos electrónicos, baterías, pantallas LED, y más.
En este contexto, Kazajistán, un país clave en Asia Central, confirmó que ahora posee un yacimiento gigante de tierras raras que podría cambiar las reglas del juego en el mercado global de estos minerales. Se estima que esta nueva reserva es la tercera más grande del mundo.
Las tierras raras son esenciales para la fabricación de tecnología como smartphones y vehículos eléctricos hasta turbinas eólicas y equipos militares. Ahora, Kazajistán se ha hecho con un yacimiento tiene casi un millón de toneladas de cerio, lantano, neodimio e itrio.
El país que se adueño de una de las mayores reservas de un recurso natural clave
El yacimiento descubierto en Kazajistán eleva al país a la categoría de jugador clave en este mercado. Actualmente, comparte mercado con China y Brasil. Los países de Europa tienen un interés estratégico y acelerado en estrechar lazos con Kazajistán ya que dependen de proveedores externos para estos minerales. Europa ve en Kazajistán un socio potencial fundamental para asegurar su cadena de suministro y fortalecer su transición energética y digital.
El anuncio del descubrimiento aún está siendo explorado. Según la empresa de exploración que hizo el descubrimiento inicial, desarrollar el yacimiento podría llevar hasta seis años y requerir unos 10 millones de dólares en materia de inversión.
Este descubrimiento no solo podría impulsar la economía del país asiático sino que también puede estrechar los lazos entre Europa y Asia en vistas de la dependencia de las grandes potencias respecto a estas materias primas.