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Las largas filas y el desplazamiento forzado entre municipios se convertirán en la nueva normalidad para los beneficiarios de programas sociales en Jalisco.
La delegada federal Katia Meave Ferniza confirmó que durante 2025 no se construyeron nuevas sucursales del Banco del Bienestar y que, hasta el momento, no existe ningún proyecto para edificar más durante 2026.
La noticia impacta directamente a más de 880,000 personas adultas mayores que reciben pensión en el estado, quienes deberán seguir enfrentando la saturación de las sucursales existentes y, en muchos casos, trasladarse a otros municipios para cobrar sus apoyos económicos.

Sin planes de expansión: Banco del Bienestar congela construcción de sucursales en Jalisco
La confirmación llegó sin rodeos. Katia Meave Ferniza, delegada federal de los Programas Sociales del Gobierno de México en Jalisco, reconoció que el año 2025 cerró sin la apertura de una sola sucursal nueva del Banco del Bienestar en el estado. Pero lo más preocupante es que tampoco hay proyectos confirmados para 2026.
“Este año ya no tuvimos nuevas sucursales del Banco del Bienestar. Se tienen previstas algunas que quedaron pendientes del Plan de Justicia, las cuales estarían en la zona de comunidades indígenas”, explicó la funcionaria federal, dejando en el aire la pregunta inevitable: ¿cuándo llegarán esas sucursales prometidas?
La única esperanza para algunas comunidades son las sucursales pendientes del llamado Plan de Justicia, destinadas específicamente a zonas indígenas. Sin embargo, no hay fechas, no hay cronogramas y, por ahora, tampoco hay certezas.
Mientras tanto, las sucursales actuales operan al límite de su capacidad, con filas que se extienden por horas y beneficiarios que deben planear sus días completos alrededor del simple acto de cobrar su pensión.
Más de 880,000 adultos mayores atrapados en el caos: filas interminables y viajes obligados
Los números son contundentes y dimensionan el problema. En Jalisco, más de 880,00 personas adultas mayores reciben la Pensión para el Bienestar, un programa al que en 2025 se destinaron más de 31 mil millones de pesos.
El gobierno federal presume que estos recursos se entregan de manera directa y sin intermediarios; sin embargo, en la práctica, la ausencia de sucursales bancarias introduce otros obstáculos: la distancia, el tiempo y la saturación.
La situación se vuelve aún más crítica para quienes viven en municipios donde no existe una sucursal. Para ellos, cobrar la pensión implica sumar al desgaste de las largas filas el costo económico y físico de trasladarse a otra localidad. Son viajes que pueden tomar dos o tres horas, con gastos de transporte que reducen el monto recibido y con la incertidumbre constante de no saber si alcanzarán a cobrar o si deberán regresar otro día.

Culpan al programa Mujeres Bienestar de la saturación mientras prometen “familiarización” sin fecha
La delegada federal tiene una explicación lista para las interminables filas: no es falta de sucursales, es culpa de la curva de aprendizaje. Según Meave Ferniza, la incorporación del programa Mujeres Bienestar durante 2025 generó “desconocimiento sobre el uso de la tarjeta” y sobre cómo realizar los retiros, lo que provocó la saturación de las sucursales.
“Esperamos que, con la familiarización en el uso de la tarjeta, pueda disminuir esta afluencia y, en caso de que exista a corto plazo la posibilidad de construir nuevas sucursales, lo estaremos informando”, señaló la funcionaria, prometiendo una mejora que depende más de la adaptación de los usuarios que de acciones concretas del gobierno.















