

El príncipe Guillermo y su esposa, Catalina, abandonaron hoy el hospital permitiendo que el mundo conozca a su flamante primogénito, quien se ha convertido en el tercero en la línea de sucesión al trono británico.
Luego de posar para las fotografías ante medios de todo el mundo, la pareja dijo que aún estaba trabajando en el nombre de su bebé y que ambos se sentían ‘muy conmovidos‘.
Catalina, que lucía un vestido azul, sonrió ante la multitud presente que aplaudía mientras sostenía a su hijo, que estaba cubierto con una manta blanca.













