En uno de los textos más sagrados de la Biblia, que además tiene una gran consonancia en la religión judía, se nombran los alimentos prohibidos para todos los creyentes en la voz de Moisés, uno de los patriarcas hebreos con gran consonancia en la Iglesia católica.

Se trata de un capítulo entero del Deuteronomio denominado “la segunda ley”, ya que los mandamientos católicos se conocen en el libro del Éxodo (cuando el pueblo de Israel se escapa de Egipto y viaja 40 años por el desierto).

¿Cuál es el verdadero alimento prohibido por la Biblia?

A diferencia de la creencia popular, el texto sagrado de los católicos no indica que la manzana haya sido el fruto del que comieron Adán y Eva “traicionando la confianza” de Dios. Sin embargo, hay algunos alimentos que están prohibidos por el texto católico en el último texto de la Torá judía y en el quinto del Pentateuco cristiano.

Carne de cerdo. Fuente: archivo.

El cerdo es también impuro porque, aunque tiene la pezuña partida, no es rumiante. No podrás comer su carne ni tocar su cadaver”, dice el Deuteronomio en su capítulo 14 y enumera también los platos y las preparaciones que son consideradas pecado:

  • camello, liebre y tejón.
  • águila, quebrantahuesos, buitre negro, gallinazo, ni especie alguna de milanos ni de halcones, ni especie alguna de cuervos, ni avestruz, lechuza o gaviota,
  • ninguna clase de gavilán, ni búho, ibis, lechuza nocturna, búho del desierto, águila pescadora, cormorán o cigüeña, ni especie alguna de garzas, ni abubilla ni murciélago.
  • A los insectos voladores.

El texto menciona que “no podrá cocinar el cabrito (ni ninguna carne) en la leche de su madre”.

Las prohibiciones completas de alimentos en la Biblia (Deuteronomio 14)

“Eres hijo del Señor, tu Dios. No te hagas cortes en la piel ni te rapes la cabeza en honor de un muerto, porque eres pueblo consagrado al Señor tu Dios. Él te eligió de entre todos los pueblos de la tierra para que fueras su propiedad exclusiva.

No comas nada que sea abominable. Los animales que podrás comer son los siguientes: el buey, la oveja, la cabra, el ciervo, la gacela, el venado, la cabra montés, el íbice, el antílope y el carnero montés. Podrás comer cualquier animal rumiante que tenga la pezuña hendida y partida en dos; pero no podrás comer camello, liebre ni tejón porque, aunque rumian, no tienen la pezuña partida. Los tendrás por animales impuros.

Fuente: FreePik

El cerdo es también impuro porque, aunque tiene la pezuña partida, no es rumiante. No podrás comer su carne ni tocar su cadáver. De todos los animales que viven en el agua podrás comer los que tienen aletas y escamas, pero no podrás comer los que no tienen aletas ni escamas, sino que los tendrás por animales impuros.

Podrás comer cualquier ave que sea pura, pero no podrás comer águila, quebrantahuesos, buitre negro, gallinazo, ni especie alguna de milanos ni de halcones, ni especie alguna de cuervos, ni avestruz, lechuza o gaviota, ninguna clase de gavilán, ni búho, ibis, lechuza nocturna, búho del desierto, águila pescadora, cormorán o cigüeña, ni especie alguna de garzas, ni abubilla ni murciélago. A los insectos voladores los tendrás por impuros, así que no los comas. Pero sí podrás comer cualquier animal alado que sea puro.

No comas nada que encuentres ya muerto. Podrás dárselo al extranjero que viva en cualquiera de tus ciudades; él sí podrá comérselo o vendérselo a un forastero. Pero tú eres un pueblo consagrado al Señor, tu Dios. No cocines el cabrito en la leche de su madre”.