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Sin antecedentes familiares o mutaciones genéticas asociadas, esta joven enfermera de 24 años se topó con un síntoma inesperado que le revelaría algo devastador: estaba transitando un peligroso cáncer.
Esta enfermedad no se desarrolla en un perfil concreto. De hecho, la mitad de los casos de mujeres que son diagnosticadas con cáncer de mama no presentan factores de riesgo específicos.
Parade entrevistó a Jenn Kelly, quien contó cuál fue el primer síntoma que notó en su cuerpo cuatro meses antes de ser diagnosticada por los especialistas.
El primer síntoma del cáncer de mama, según Jenn Kelly, una joven que transita la enfermedad
Durante una ducha, la joven enfermera notó algo diferente en su cuerpo, un bulto inusual en su pecho. Este detalle le pareció normal, ya que no era doloroso y podía tratarse de algo benigno, como un quiste o fibroma.
"No tengo antecedentes familiares de cáncer de mama, ni soy portadora de ninguna mutación, como el gen BRCA. Pasaron aproximadamente cuatro meses desde que noté por primera vez un bulto hasta que me diagnosticaron cáncer de mama metastásico en estadio 4".
Los cambios y el primer diagnóstico
Kelly no tenía urgencia, ya que no le parecía nada grave, por lo que sacó turno con un médico con un mes de antelación. Durante este tiempo vio cómo su pecho iba cambiando, con transformaciones visibles que la asustaban cada vez más.
Cuando tuvo la consulta fue sometida a una mamografía y ecografía, pero el diagnóstico inicial no detectó nada sospechoso. Sin embargo, su ginecólogo decidió hacer una investigación más minuciosa y referirla con especialistas.

Cáncer de mama: el diagnóstico abrumador de Jenn Kelly
Luego de una serie de estudios adicionales, los doctores le revelaron a la joven paciente que, no solo tenía cáncer, sino que estaba transitando un estado metastásico, que había afectado ganglios, hígado y huesos.
"Emocionalmente, fue abrumador pasar de ser una joven adulta sana a enfrentar un diagnóstico terminal", afirmó.
"Mi primer oncólogo incluso me dijo que solo me quedaban unos meses de vida y que tendría que recibir quimioterapia por el resto de mi vida", contó la enfermera.
Tratamiento para el cáncer de mama
Luego de su diagnóstico, Jenn atravesó múltiples cursos de tratamiento, desde quimioterapia hasta terapias hormonales. El tamaño de los tumores se redujo, pero no lograron eliminar la enfermedad por completo.
A pesar de haber atravesado ocho tratamientos diferentes, las investigaciones y financiamiento para el cáncer metastásico son pocas.













