

Cuando llega el invierno en Argentina, también se impone una costumbre que viene con una de las frutas más esperadas de la estación: la mandarina. Dulce, jugosa, fácil de pelar y rica en nutrientes, esta fruta no solo es deliciosa, sino que también ofrece múltiples beneficios para la salud.
Entre junio y julio, la mandarina entra en su punto óptimo de maduración, y también es cuando más se produce, lo que la convierte en una excelente aliada para atravesar la temporada de frío de forma natural, saludable y por menos de $1.000 el kilo.
Uno por uno, los beneficios de consumir mandarina
La mandarina es mucho más que una fruta rica y fácil de comer. Es una fuente poderosa de salud, bienestar y energía, especialmente en los meses fríos.
1. Refuerza las defensas
La mandarina es rica en vitamina C, fundamental para mantener un sistema inmunológico fuerte. Su consumo regular ayuda a prevenir resfríos, gripes y otras infecciones comunes durante los meses fríos.

2. Mejora la digestión
Gracias a su contenido en fibra soluble, la mandarina favorece el tránsito intestinal, alivia el estreñimiento y contribuye a una digestión más ligera y eficiente.
3. Es antioxidante y antiinflamatoria
Contiene flavonoides como la hesperidina, que actúan como antioxidantes naturales. Ayudan a combatir el daño celular, reducir la inflamación y prevenir enfermedades crónicas.
4. Cuida tu piel desde adentro
La vitamina C también participa en la producción de colágeno, mejorando la elasticidad y el aspecto general de la piel. Ideal para contrarrestar los efectos del frío y la sequedad del invierno.

5. Ayuda a regular el colesterol
Algunos compuestos de la mandarina colaboran en la reducción del colesterol LDL (malo), lo que favorece la salud cardiovascular y protege al corazón.
6. Tiene efecto diurético y depurativo
Al ser rica en agua y potasio, estimula la función renal, previene la retención de líquidos y ayuda al cuerpo a eliminar toxinas de forma natural.
7. Es una fruta liviana y práctica
Con solo 35-50 calorías por unidad, la mandarina es ideal para colaciones saludables. Además, es fácil de pelar, no requiere utensilios y se puede llevar a cualquier lugar.
¿Por qué aprovecharla ahora?
Consumir mandarinas durante su temporada -junio y julio en Argentina- garantiza mejor sabor, mayor aporte nutricional, precios más bajos y menor impacto ambiental, ya que se trata de una fruta local y de estación.














