

El Gobierno nacional avanzará con un ambicioso plan de intervención sobre la Ruta Nacional 40 en Río Negro, luego de que el Juzgado Federal de Bariloche autorizara y ordenara la ejecución urgente de trabajos para revertir el deterioro del corredor andino.
La decisión marca el inicio de una obra estratégica destinada a garantizar seguridad vial, desarrollo económico y conectividad en una de las rutas más emblemáticas del país.
La resolución, firmada por el juez Gustavo Villanueva, llegó tras numerosos planteos de la provincia de Río Negro y otros organismos que advertían sobre el riesgo creciente del tránsito. El reclamo, que durante años no obtuvo respuesta, ahora se transforma en una oportunidad para encarar una intervención profunda que reposicione a la Ruta 40 como eje central del movimiento productivo y turístico patagónico.
En un comunicado reciente, el gobierno rionegrino destacó que la traza es vital para la conectividad andina y el desarrollo de las economías regionales, subrayando que su deterioro “pone en riesgo la vida e integridad de quienes la transitan diariamente”. Con el aval judicial, esas advertencias se traducen en un plan de obra concreto, financiado con el presupuesto vigente de Vialidad Nacional.
Reparaciones inmediatas: la primera etapa de la obra
El fallo ordena a Vialidad Nacional ejecutar sin demoras un paquete de trabajos urgentes que se considerarán el puntapié inicial de la intervención integral. Entre las reparaciones principales figuran la corrección de pozos, grietas, deformaciones y ahuecamientos que afectan la calzada en múltiples sectores.
También se dispuso resolver de inmediato los descalces de banquinas, un problema recurrente que agrava la peligrosidad del tránsito en zonas de curvas y pendientes pronunciadas. A esto se suma la reposición completa de la señalización horizontal en los puntos intervenidos, indispensable para garantizar visibilidad y ordenamiento vehicular.

Además, deberá colocarse señalización vertical, tanto diurna como nocturna, en curvas, badenes, sectores con riesgo de derrumbe y otros puntos críticos. Todas estas tareas forman parte de una etapa que el Gobierno considera prioritaria para estabilizar el tránsito mientras se prepara la obra de mayor alcance.
Planificación estratégica y mantenimiento a futuro
Dentro de los primeros 90 días, Vialidad estará obligada a presentar un relevamiento exhaustivo de cada tramo comprometido, acompañado de un cronograma detallado de ejecución. Este mapeo permitirá definir las soluciones técnicas más adecuadas y consolidará el diseño final de la intervención integral sobre la ruta.
En ese mismo plazo, se deberá elaborar un informe técnico que determine si existe riesgo de arrastre de material rocoso en las zonas montañosas. Si se confirmara la peligrosidad, el organismo tendrá que proponer medidas correctivas y establecer plazos de aplicación para evitar deslizamientos futuros.
Además, Vialidad deberá informar si es necesario instalar puestos de control de carga, herramienta clave para preservar la vida útil de la ruta y evitar daños derivados del exceso de peso en vehículos pesados. Toda esta información será la base para el plan de mantenimiento que deberá presentarse una vez cumplidos los primeros 120 días.
Ese plan integral de conservación incluirá acciones preventivas, rutinas de mantenimiento periódico y mecanismos de monitoreo permanente, con el objetivo de sostener a largo plazo la seguridad de un corredor vital para la Patagonia.

Un fallo que habilita una nueva etapa de gestión
La sentencia reafirma el rol activo de la provincia de Río Negro en la defensa de la seguridad vial y reconoce la falta de respuestas de años anteriores. Con esta decisión, la Justicia habilita formalmente una nueva etapa de gestión conjunta entre Nación y provincia para transformar la Ruta 40 en un corredor seguro y moderno.
El Gobierno considera que la obra no solo resolverá problemas acumulados, sino que representará un relanzamiento estructural de la conectividad andina. Con la planificación en marcha y las reparaciones urgentes ya ordenadas, comienza una etapa de inversión y renovación que impactará en miles de vecinos, turistas y trabajadores que dependen a diario de esta vía fundamental.















