Cuando todavía faltan dos meses para que reinicie su producción en el país, Fiat anticipa la llegada de su Siena cordobés con el lanzamiento de la versión Class del mediano que, hasta ahora, importa de Brasil. La nueva variante constituirá el tope de gama del modelo, en cuanto a versiones nafteras se refiere. Todos equipados con propulsor a ese combustible, se comercializará con precios de $ 42.300 a $ 43.980, en promedio, 15% por encima de su oferta actual. La italiana aspira a comercializar 250 a 300 mensuales, cerca de un 30% de las ventas del producto.

En 2006, el Siena aportó el 17,4% de los 43.384 patentamientos que Fiat registró en el mercado local, según la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara). En siete meses de 2007, se matricularon 6.311, sobre un total de 34.187 que comercializó al público la escudería italiana.

A principios de 2002, a raíz de

una abrupta caída de sus ventas domésticas –más del 60% durante 2001–, Fiat decidió interrumpir la producción del Siena en su planta de Ferreyra, Córdoba. A raíz del repunte que registró la industria automotriz local después de la crisis –desde 2002, quintuplicó sus volúmenes, hasta superar las 500.000 unidades, según se proyecta para este año– la terminal europea decidió invertir u$s 60 millones para reactivar, a partir de octubre, la fabricación de vehículos en el país, con el reinicio de la producción del Siena.

La italiana proyecta fabricar 50.000 unidades del modelo en 2008, de las cuales un tercio (15.000) se destinarán al mercado interno.