Cuando los empleados de la compañía estadounidense de biotecnología Genzyme sienten que necesitan despejarse, se sientan en un jardín ubicado a sólo unos pocos pasos de sus lugares de trabajo.

Los jardines internos de Genzyme son reducidos, pero “crean una sensación de libertad , dijo Bo Piela, director de comunicaciones corporativas. “Después de pasar un día en salas de reuniones, las charlas con colegas en un espacio rodeado de árboles son más relajadas .

La psicología evolutiva quizás explique porqué el personal de Genzyme busca la luz natural y el aire libre. Judith Heerwagen, una ecologista comportamental, aseguró que nosotros preferimos los ambientes que se parecen a los paisajes que prefirieron nuestras especies durante la etapa nómada de la evolución humana. Un hábito en las empresas que Heerwagen atribuye a impulsos evolutivos incluye la tendencia a tener macetas con plantas (indicio de abundantes fuentes de alimento) y el rechazo por los lugares de trabajo que visualmente son monótonos, cercados o totalmente abiertos.

Ella recomienda intercalar entre las hileras de terminales de trabajo áreas comunes y retiradas para brindar al personal lugares donde socializar o estar en privado.

Asegura que las paredes coloridas brindan bienestar y que los empleados deberían poder ajustar los niveles de luz a su gusto.