La correlación entre el precio de los bonos y las reservas ha sido alta en los últimos años. Sin embargo, en los últimos meses esa relación se rompió.
Mientras los bonos subieron con fuerza, ganando hasta 40% en el último mes, las reservas se desplomaron u$s 8000 millones.
El pago de cupones de la deuda privada garantiza una mayor caída en las reservas. Ven mayores subas en los bonos, aunque de manera limitada.
Precios altos y reservas bajas
Los bonos argentinos ensayan una pausa. El recorte se da después de ganancias muy abultadas en los últimos dos meses.
El buen dato de empleo en EE.UU. de ayer renovó expectativas sobre mayores subas de tasas por parte de la Fed, empujando al alza a los rendimientos de los bonos del Tesoro norteamericano.
Dicha suba en las tasas implica una caída en los precios de los bonos del Tesoro de EE.UU., lo que, en definitiva, termina generando una baja en el resto de las curvas de bonos a nivel global, arrastrando también a la deuda argentina.
Sin embargo, en el mediano plazo se observa una disociación entre los bonos argentinos y una variable clave con la que la renta fija local ha tenido una elevada correlación: las reservas.
Desde el piso de comienzo de mayo a la fecha, los Globales argentinos muestran avances importantes que van desde el 28% hasta el 37%.
En paralelo, las reservas brutas pasaron de u$s 35.540 millones, hasta los actuales u$s 27.527 millones, es decir, una merma del 21%.

Generalmente, los bonos y las reservas han tenido una correlación elevada.
Esto se debe a que, cuando el mercado percibe que el BCRA incrementa sus recursos (reservas) para hacer frente a sus compromisos financieros, la probabilidad de ver un incumplimiento es menor, y por lo tanto, los bonos tienden a subir.
En cambio, cuando caen las reservas, el BCRA tiene menos recursos para pagar la deuda, y los riesgos de incumplimiento son mayores, provocando una caída en el precio de los bonos.
Sin embargo, desde fines de abril a la fecha, los bonos y las reservas se desacoplaron, es decir, han perdido la correlación con la que suelen operar en el mediano plazo.
Martín Przybylski, Portfolio Manager de Consultatio Financial Services, afirmó que, si bien es cierto que históricamente los bonos han estado bastante correlacionados con la evolución de las reservas, en el último tiempo se vio cierta disociación entre ambos.
Según su análisis, esa disminución en la correlación puede ser en parte explicada por un contexto internacional favorable, así como también por cuestiones políticas, principalmente luego del anuncio de las candidaturas.
Hacia adelante, y dada esa falta de correlación entre bonos y reservas, Przybylski alerta que luce difícil saber si los bonos podrán continuar su rally.
Sin embargo, Przybylski se muestra aún optimista sobre la deuda.
"Es complejo proyectar la dinámica de los bonos, sobre todo teniendo en cuenta la dificultad para cerrar un acuerdo con el FMI, y una dinámica de reservas que continúa empeorando, en un segundo semestre que estacionalmente suele ser malo para la misma. Sin embargo, no descartamos que la suba de los bonos pueda continuar, no tanto por los fundamentos de corto plazo, sino anticipándose a un cambio político en las próximas elecciones", comentó.
Por su parte, Juan Pedro Mazza, estratega de Cohen también se mostró optimista sobre los bonos, a pesar del desarbitraje entre estos y las reservas.
De cualquier manera, advierte que el estado de situación del stock de reservas es una cuestión clave a monitorear.
"Con gran parte de las elecciones todavía por delante, seguimos viendo la posibilidad de subas en los bonos. Sin embargo, la situación de las reservas es crítica y complica la capacidad de repago del próximo Gobierno. Así, el desalineamiento entre los bonos y las reservas es un equilibrio muy frágil, sujeto a que la situación no empeore mucho más", comentó.

Menos reservas por el pago de cupones
Una variable clave en el corto plazo es el pago de cupones. El Gobierno deberá hacer frente a u$s 1050 millones en concepto de pago de cupones de la deuda con privados.
Esto probablemente afecte al stock de reservas, llevándolas a un nivel aún más bajo en términos de reservas brutas y más negativas en concepto de reservas netas.
El secretario, a través de su cuenta de Twitter, aseguró que la Argentina pagará los casi u$s 1050 millones de los cupones de los Globales y Bonares el próximo lunes.
Si bien esta noticia es positiva, el mercado luego del pago girará su atención a la dinámica en las reservas.
"Alrededor de 75% al 80% de estos títulos están en manos privadas, por lo cual el impacto sobre reservas netas se deberá netear de lo que reciba el BCRA en concepto de su tenencia. El impacto sobre las reservas netas del pago será tímidamente inferior a los u$s 1050 millones.", dijeron los analistas de PPI.
Además, desde PPI estimaron que, "bajo el supuesto que el BCRA tiene un resultado neutro en el MULC entre este miércoles y viernes, las reservas netas se hundirían a alrededor de - u$s 6014 millones si no llegan los desembolsos del FMI".

Por lo tanto, el rally de la deuda, desacoplándose en el corto plazo de la dinámica de las reservas implica que el mercado está especulando con variables distintas de los factores fundamentales.
En ese sentido, el trade electoral es el causal de las grandes subas recientes de la deuda y de los activos argentinos en las últimas semanas.
Juan Manuel Truffa, asesor y director de Mercados para Todos, agregó que desde el lado de los fundamentos no se encuentran respuestas al rally reciente de la deuda dolarizada, por el contrario, la situación es precaria.
En ese sentido, puntualiza el estado de situación de reservas netas cada vez más negativas, la actividad y recaudación en retroceso, el frente político, etc.
Sin embargo, agregó que la unción de Sergio Massa como el candidato de UxP evita (a priori) un escenario disruptivo hasta las elecciones, administrando la fragilidad.
"Este factor pareciera tener más peso que el propio efecto negativo sobre la oposición, hasta hace una semana ganador indiscutido de la contienda de octubre, ahora con un candidato con chances reales de hacer una buena performance no sólo en las PASO. En la renta fija hard-dollar, el trade electoral no es del todo claro, pero las bajísimas paridades, con un mundo que acompaña, nos hacen suponer un razonable resguardo", remarcó.














