JP Morgan emitió un nuevo informe sobre la Argentina en el que advierte que, si bien mantiene "una visión constructiva de las perspectivas a mediano plazo de Argentina, dada la desinflación y el progreso fiscal" el banco prefiere "dar un paso atrás y esperar a que se registren mejores niveles de entrada" en los activos locales. Así, el banco anunció que retira su recomendación sobre los bonos argentinos por el momento y aconseja tomar ganancias sobre instrumentos de largo plazo, principalmente.

El gigante de Wall Street señaló, en su reporte titulado "Argentina: Tomando un respiro" que decidió apostar al mercado local el 15 de abril, poco después del anuncio del gobierno sobre un nuevo régimen cambiario (que fue el 11 de abril).

"Consideramos que el nuevo acuerdo estabilizaría las expectativas cambiarias futuras, con la banda superior actuando como un respaldo creíble en medio de un sólido aumento de las reservas; era probable que las condiciones de liquidez se mantuvieran suficientemente ajustadas dado el nuevo enfoque del marco monetario en los agregados M2; y se preveía que las entradas de divisas provenientes de las actividades agrícolas serían favorables. Esto parecía una buena configuración para las operaciones de carry trade de divisas, a pesar de los niveles de TCER relativamente apreciados", señala JP Morgan.

Pero que algunos elementos hacen que decida vender las posiciones largar en Argentina. Se refirió a que ya han pasado los picos de entrada de capitales agrícolas, se mantiene la salida de capitales por turismo, crece el posible ruido electoral y esperan un rendimiento inferior al esperado del ARS (peso), que impulsa la intervención cambiaria mediante derivados.

En ese contexto, JP Morgan resolvió recoger ganancias en las LECAP de largo plazo. "Expresamos nuestra preferencia por las operaciones de carry trade de divisas a corto plazo en lugar de las posiciones de mayor duración, considerando la estacionalidad y los riesgos asociados a las elecciones legislativas programadas para el 26 de octubre. Los acontecimientos recientes justifican un enfoque más cauteloso a corto plazo", indicó JP Morgan.

La explicación del informe sobre Argentina señala que "los acontecimientos recientes justifican una estrategia más cautelosa a corto plazo". Se refiere al hecho de que el dólar de Argentina (ARS) ha tenido un rendimiento inferior en los mercados emergentes durante los últimos dos meses en cuanto a la rentabilidad al contado, con la mayoría de las divisas apreciándose en ese período.

"Esto ocurrió durante algunos de los meses más favorables en términos de estacionalidad, en los que las entradas de divisas agrícolas superaron ligeramente los promedios de la última década. Además, el gobierno intervino en el mercado de derivados de divisas", advirtió JP Morgan.

Recuerda que, durante mayo, se vendieron u$s 1500 millones a pesar de que la moneda no había alcanzado el límite superior de la banda (esto está permitido en el marco del FMI). El Banco Central (BCRA) ha intervenido en divisas, elevando u$s 1500 millones en mayo desde los u$s 376 millones en marzo.

"Hemos estado advirtiendo que la dinámica de la cuenta corriente requería atención, y en particular, las salidas de capitales por turismo podrían seguir siendo una fuente de presión, especialmente antes de las vacaciones de invierno. Los últimos datos de la balanza de pagos muestran salidas netas trimestrales de u$s 3500 millones (1,9% del PIB) en el primer trimestre de 2025", enfatizó el informe.