El Banco Central (BCRA) ahora contará con un potencial apoyo a las reservas en la medida que ejerza el swap con EE.UU. para contener el tipo de cambio, pero el mercado se prepara para un eventual giro en el régimen cambiario tras las elecciones.
¿En qué valores espera el mercado el dólar tras las elecciones y qué es lo que les importa a los analistas de cara a la implementación de un potencial esquema cambiario renovado?
Tensión cambiaria y un nuevo esquema
El apoyo de EEUU a la Argentina quedó 100% confirmado el lunes por la mañana, luego de que circulara un comunicado del BCRA que anunció el acuerdo del swap con el Tesoro americano.
Pese a la confirmación de dicho apoyo, el tipo de cambio siguió al alza ayer y se acercó nuevamente al techo de la banda.
La incertidumbre electoral genera tensión en el mercado dado que los inversores especulan con un fin del esquema cambiario actual y esperan un nuevo modelo tras las elecciones de octubre.
El apoyo por u$s 20.000 millones por parte de Scott Bessent, el secretario del tesoro de EEUU permitirá al BCRA tener mayor poder de acción para contener el tipo de cambio, a la vez que dota al Banco Central de más recursos para poder hacer frente a la deuda soberana argentina a corto y mediano plazo.
No obstante, los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI), explicaron que el swap no modifica las reservas netas, pero sí lo hace en las liquidas.
Según cálculos de PPI, las netas (contemplando como pasivo de corto plazo a los depósitos del Tesoro en moneda extranjera y a los vencimientos de BOPREAL a doce meses vista) se estiman en u$s 1540 millones.
En lo que respecta a las líquidas, están estimadas u$s 18.150 millones, incluyendo DEGs, y con el acuerdo ascenderían a u$s 38.150 millones (desde los u$s 18.150 millones previos al acuerdo)
Los precios que pone el mercado
Si bien al BCRA ahora contará con potenciales mayores recursos (en la medida que ejerza el SWAP), para contener el tipo de cambio, el mercado se prepara para un eventual cambio de régimen cambiario.
Cuando se analizan los dólares futuros y los tipos de cambio break even en las curvas de bonos en pesos, los inversores ponen precios a que el actual esquema cambiario sufrirá cambios en el corto plazo.
Los tipos de cambio break even en la curva de tasa fija marcan un dólar implícito cercano a los $1600 entre diciembre y enero, saltando a $1800 para febrero y marzo y acercándose a los $2000 para mitad de año que viene.
Por su parte, los tipos de cambio implícitos en la curva de dólar futuro esperan que el dólar oficial se ubique por encima de la banda desde diciembre en adelante, subiendo a $1600 en febrero, y en $1700 para mayo del 2026.
Estos valores de dólares se dan incluso a pesar de que el ministro de economía, Luis Caputo, e incluso el secretario del tesoro de EEUU, Scott Bessent, hayan remarcado que el actual esquema cambiario se va a mantener.
Dicho de otra manera, a pesar de las confirmaciones de los funcionarios, el mercado igual se prepara para un nuevo esquema cambiario y monetario, el cual podría llegar luego de las elecciones.
Rodrigo Benítez, economista jefe de MegaQM, indicó que, si se toma junio como referencia y considerando la expectativa de tipo de cambio implícita en las Lecaps, así como la inflación esperada y la inflación internacional, el mercado espera entre 15 y 20 puntos de ganancia de tipo de cambio real.
"Si los valores a los cuales opera el mercado hoy hacia adelante son de equilibrio o no, no se puede saber hasta entender mejor qué resultados arroja el proceso electoral y en función de eso cómo se diagrama el mercado de cambios hacia adelante", indicó.
Además, agregó que el interrogante pasa por empezar a comprender cuál es el flujo de inversiones que puede llegar y cuántos dólares necesita el Tesoro (con o sin roll over).
"Esos factores tendrán mucho que ver en el punto de equilibrio y servirán para comprender si los inversores están valuando correctamente o se puede dar alguna corrección", detalló Benítez.
Poniendo foco en las reservas
La clave para la mayoría de los analistas pasa por el hecho de que el Gobierno encuentre un esquema que le permita acumular reservas ya que, desde la implementación de las bandas, las compras de reservas por parte del BCRA en el mercado de cambios fueron nulas.
Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, explicó que el plano cambiario es una cuestión que sobre la que los inversores se mantienen alerta.
A la vez, remarcó que dicha cuestión la considera de fundamental importancia, junto al veredicto del mercado respecto al resultado electoral.
"La incertidumbre gira en torno a si se modificará o no el régimen cambiario tras las elecciones. Más que el régimen en sí, lo relevante será si permite o no la acumulación de reservas netas genuinas, cuestión que consideramos crucial, desde lo macro-financiero, para la compresión de Riesgo País y el re acceso al mercado voluntario de crédito en dólares que permita renovar la exigente deuda en en dólares de Argentina de los próximos años", detalló Franco.
Sobre el potencial nuevo esquema cambiario, Franco consideró que "el nivel del tipo de cambio real (TCR) resultante de cualquier esquema elegido deberá ser tal que permita la acumulación de reservas, en un contexto en que si bien la dinámica de las exportaciones, tanto en cantidad como en valor, es virtuosa, las salidas y demanda de dólares sigue presionando las cuentas externas, como venimos marcando desde hace meses".
Hubo algo de ruido respecto al régimen el día martes, cuando el Ministro de Desregulación Federico Sturzenegger, dijo en un evento que Argentina tendría tipo de cambio flotante "muy pronto", aunque luego aclaró en redes que no había querido decir eso.
Funcionarios del gobierno volvieron a ratificar el esquema de bandas, a la vez que en la reunión en la Casa Blanca Bessent dijo que "estamos contentos con el esquema cambiario".
Adrián Yarde Buller, economista jefe de Facimex Valores, coincide en que, tras la elección, la prioridad debería migrar hacia la acumulación de divisas y una agenda pro-crecimiento, dejando un poco de lado la desinflación.
"Ya sin el riesgo latente de necesitar el acceso al mercado para seguir pagando la deuda, acumular divisas de forma orgánica será clave para reabrir los mercados. Pocos emergentes de alto rendimiento tienen curvas con pendiente negativa en el mundo y Argentina es uno de ellos, señal de que el mercado sigue viendo que gran parte del problema solo se resolverá mejorando la posición de liquidez", sostuvo.
Por lo tanto, la atención se centrará en el nuevo esquema cambiario y monetario tras las elecciones.
"Las definiciones de política cambiaria dependerán de la velocidad requerida en términos de acumulación de divisas y el tipo de cambio real resultante de los números de la elección. Contrariamente a lo que descontó el mercado durante buena parte de los últimos meses, esto no implica que necesariamente deba abandonarse la banda cambiaria o recalibrar su nivel", afirmó Yarde Buller.
Sobre las características de las potenciales nuevas bandas, Yarde Buller detalló que probablemente sería deseable recalibrar la tasa de ajuste mensual para acomodarla a la diferencia que hubo entre la inflación local (1,96% m/m) y la internacional (0,25% m/m), de manera de evitar que el techo de la banda siga apreciándose en términos reales.
"En cualquier caso, el impresionante respaldo financiero de Estados Unidos será clave para implementar cualquier eventual modificación desde una posición de fortaleza", remarcó.
Previa electoral con volatilidad
De cara a las elecciones, la dolarización de carteras por parte de los inversores se mantiene a causa de la incertidumbre que tal evento genera.
Por ello, la suba del dólar hoy presiona también para que las expectativas cambiarias hacia adelante se mantengan deterioradas.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI), remarcaron que la volatilidad cambiaria se exacerba y que esperan que la misma se mantenga, asumiendo que la incertidumbre se mantiene post elecciones.
"Con pocas ruedas hasta las elecciones de medio término, el mercado entra en zona de alta tensión. La demanda de dolarización de portafolios del retail, típica de períodos pre-electorales, se acelera (es normal que en los meses previos a los comicios la formación de activos externos de minoristas suela, como mínimo, duplicarse). Ni siquiera la intervención del Tesoro norteamericano logra frenar del todo esta dolarización de carteras", dijeron.
Sobre lo que pueda pasar después del domingo, desde PPI reconocen que es una incógnita, aunque sí se espera más volatilidad.
"Las encuestadoras llegan con escasa precisión, especialmente después de que pocas hayan anticipado lo sucedido en la Provincia de Buenos Aires, y el mercado se prepara para reacciones posiblemente exageradas. Se viene una semana intensa y dominada por una sola consigna: más demanda de dólares y menos margen para errores", detallaron desde PPI.
Los analistas de Cohen también conocen que se mantendrá la tensión cambiaria preelectoral.
"En la recta final hacia las elecciones de medio término, la agenda estará marcada por la expectativa y la incertidumbre respecto del resultado. Con la tensión en ascenso, el mercado cambiario seguirá bajo estrés y, con el tipo de cambio nuevamente en el techo de la banda, es probable que el BCRA deba volver a utilizar los fondos otorgados por el FMI para sostener el esquema", indicaron.
Finalmente, Auxtin Maquieyra, Gerente Comercial de Sailing Inversiones, también espera más volatilidad en lo que queda de esta semana.
"El swap de monedas por u$s 20.000 millones finalmente se concretó y llega en un momento clave para reforzar las reservas brutas del Banco Central. De esta manera, la autoridad monetaria cuenta con un poder de fuego considerable para enfrentar eventuales corridas y defender el techo de la banda cambiaria", detalló.
Sin embargo, advierte que la tensión se mantendrá hacia las elecciones.
"En este contexto, la volatilidad continuará elevada, ya que el principal factor que explica el nerviosismo actual no es externo sino político: las elecciones legislativas del próximo domingo, que mantienen en vilo a los operadores y determinan en buena medida el rumbo de los precios locales", dijo.














