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Iván Scherman es Chartered Market Technician y, argentino, fue el primer latinoamericano en ganar el Campeonato Mundial de Trading de Futuros. Logró ese hito en 2023, un certamen en el que compiten más de 5000 expertos calificados de todo el mundo. Lo que se evalúa en esta competencia es la capacidad para pronosticar precios, técnicas de trading y gestión del riesgo. Y él es pionero en eso.
El fondo de inversión de Scherman «Emerge Funds» es gestionado con inteligencia artificial en base a cálculos matemáticos sofisticados y las herramientas que utiliza pueden escanear miles de activos en tiempo real. Operan en forma 100% robotizada desde hace años. En esta entrevista cuenta qué técnicas usa y analiza las mejores estrategias de inversión en el mundo que viene.
¿El rally que se ve en las tecnológicas y las advertencias sobre una burbuja de la IA deberían preocuparnos?
No hay que olvidar que, más allá de que estos últimos días, el S&P 500 estuvo cayendo, no estamos muy lejos del 3% de máximos históricos. Con lo cual, no hay una situación preocupante de corto. En términos de estacionalidad, estamos en un período alcista. Si uno mira los patrones de años anteriores, en las circunstancias actuales, nunca noviembre-diciembre combinados terminaron negativos. Con lo cual, lo más esperable es que el bimestre termine positivo. No obstante, sí tenemos un poco más de nubarrones a mediano plazo.
Lo que nuestros modelos detectan es que nos estamos acercando a una corrección de magnitud. Al ritmo en que están viajando la mayoría de las acciones en los distintos mercados, que nosotros seguimos a través de elementos cuantitativos, es una señal bastante preocupante. Más allá de las interpretaciones de si hay o no hay una burbuja, porque, en definitiva, en términos de operatoria, tratar de hacer timing de una burbuja es peligroso.
“Al ritmo en que están viajando la mayoría de las acciones en los distintos mercados, que nosotros seguimos a través de elementos cuantitativos, es una señal bastante preocupante”.
Uno no sabe si va a explotar mañana o en dos años. Entonces, me parece que lo más importante es cómo se comportan los activos bajo la superficie del S&P 500 y eso en nuestros modelos nos da que tenemos una corrección inminente dentro del primer trimestre de 2026.
Cuando habla de nubarrones, ¿qué elementos son los más preocupantes?
Un dato clave es que, si bien muchas acciones están subiendo, el resto está performando bastante mal. Hay una cantidad muy grande que están haciendo nuevos mínimos anuales. Es más, la relación entre los nuevos mínimos anuales y los nuevos máximos anuales favorece a los nuevos mínimos anuales. Eso normalmente precede correcciones de magnitud.
No digo un mercado bajista, pero sí, una corrección de magnitud, que puede llegar al 20% aproximadamente. Eso es lo principal, lo que nosotros estamos viendo, que en circunstancias pasadas, cada vez que se dieron estos comportamientos, el 67% de las veces, antecedieron a una corrección de magnitud en el mercado americano. Porque ese incremento en los nuevos mínimos anuales de la mayoría de las acciones del NYSE, concretamente las acciones donde está habiendo un desarme, implica que hay una liquidación anticipada de los jugadores importantes.
“Concretamente, las acciones donde está habiendo un desarme, implica que hay una liquidación anticipada de los jugadores importantes”.
Por eso están habiendo nuevos mínimos anuales más que nuevos máximos. ¿Y a dónde va esa liquidez que surge de ese desarme? A bonos, a commodities.
Hablaba recién de los modelos que usan para analizar el mercado. ¿Qué herramientas utilizan?
Entendemos que todos los activos tienen un conjunto de patrones de comportamientos y que hay un conjunto de hechos azarosos. Esas dos cosas componen cualquier tipo de mercado, sea el café, Google o la madera. Entonces, uno puede, para poder efectivamente utilizar herramientas que objetivamente nos permiten diferenciar lo que es repetitivo en los mercados de lo que no lo es.
Usamos herramientas de ingeniería y de física para observar esos comportamientos y poder ver, a través de esos instrumentos de ingeniería y de física, qué es lo que sucede cada vez que uno de estos patrones se presenta, qué desenlace tiene y operar en consecuencia.
Si un activo empieza a moverse determinada manera y en términos temporales el recorrido que tiene por línea de tiempo es mayor, implica que está teniendo velocidad y uno puede detectar, de la misma manera que uno mide con la física la aceleración de un auto, la de los precios. Así también, cuando uno empieza a tener una resistencia contra el movimiento del activo en la serie de temporadas en que uno lo mire empieza a presentar patrones con grandes velas al alza y a la baja.
Eso normalmente implica o que el movimiento se va a detener o que va a tomar una dirección contraria. Y uno también lo puede observar con las mismas herramientas de la física con las que se observa la desaceleración de un auto. Bueno, nosotros tomamos ese tipo de herramientas para observar el comportamiento de los activos.
“Nosotros tomamos herramientas de la física para observar el comportamiento de los activos”.
¿Cambió algo el patrón a partir del Liberation Day de Donald Trump que cambió el esquema global de comercio?
El Liberation Day no deja de ser una circunstancia fundamental. Ese día se vio un disparo en la volatilidad del S&P 500 y en el VIX, que es el índice de miedo de los Estados Unidos, que tuvo un repunte en un solo día del 50%.
El VIX lo que hace es anticipar un reversal del mercado muy fuerte al alzar. Entonces, el Liberation Day, más allá de lo malo que fue para el mercado, fue una excelente oportunidad. Originó un rally en consecuencia, que nosotros pudimos aprovechar muy bien.
¿Y cuáles son las mejores estrategias hoy en día para cubrirse ante la volatilidad que viene hacia adelante?
En principio, tener una visión de portafolio. Si yo le hago caso a mi abuela, que me decía que no ponga todos los huevos en la misma canasta, voy a estar blindado si el S&P 500 tiene una corrección fuerte. Por ejemplo, eso no podría afectar mis posiciones largas en café o cortas en gas natural, sino que solamente se limitaría a lo que corresponde al mercado americano.
Después, obviamente, trabajar con un stop loss en cada una de las posiciones y que el riesgo que uno tiene por eso no supere el 2% del portafolio. Yo creo que eso es fundamental para que cualquier drop down que vaya a tener en el portafolio sea recuperable.
“El Liberation Day, más allá de lo malo que fue para el mercado, fue una excelente oportunidad. Originó un rally en consecuencia, que nosotros pudimos aprovechar muy bien”.
Nosotros estamos largos en commodities agrícolas que entendemos que están absorbiendo liquidez del mercado. Tenemos posiciones en soja, en algodón, entre otros. El oro está sobreextendido. En cambio, las commodities agrícolas están más cercanas a los metales preciosos. Los industriales también los vemos subir más y estamos largos en cobre.
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