El Banco Central comprará y acumulará reservas en los próximos meses, proyectándose hacia el año que viene, en la medida en que se remonetice la economía, de acuerdo con lo que anticipó el vicepresidente de la entidad a inversores en una conferencia en los EE.UU.

La decisión fue publicada en la página web del BCRA en una presentación realizada por el vicepresidente Vladimir Werning ante inversores semanas atrás en Washington.

"La evolución de los objetivos monetarios en Argentina: de la estabilización (2024) y régimen de transición (2025) a la remonetización impulsada por la demanda (2026) para soportar el incremento de la compra de reservas", se titula el paper difundido este miércoles por la tarde.

En la presentación, del 15 y 16 de octubre pasado, el Central detalla que luego de las elecciones de medio término se abriría una oportunidad para la recuperación de la demanda de dinero, que sería compatible con la inyección de pesos mediante una compra de dólares.

Tal posibilidad hasta el momento solo se produciría cuando el precio del dólar se ubicara debajo de la banda cambiaria definida en el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Según la presentación de Werning, la demanda de pesos se encontraba retraída producto de una tendencia hacia una dolarización. No solo eso, sino que esa demandas fue provocada, además, por la política monetaria del Gobierno y la fuerte suba en las tasas de interés.

Werning indica, en su presentación, que las principales fuentes para inyectar pesos dentro de la economía "no se encuentran disponibles": el déficit fiscal y el desarme de la deuda. Y menciona que la remonetización provendría de la compra de divisas a partir del "dinero externo" generado por el superávit.

"Al establecer el ritmo de compras de reservas para financiar un aumento proyectado en la cantidad de pesos demandados, la política monetaria puede contribuir a impulsar la liquidez externa, lo que, al estabilizar las expectativas cambiarias, indirectamente ayuda a preservar la estabilidad interna", explica el documento del Central.

El paper no hace alusión a las intervenciones del Tesoro de los EE.UU. en el mercado de cambios argentino.