Era el bar favorito de Hemingway, Picasso y Dalí en Barcelona y aún puedes visitarlo

Explorar los rincones favoritos de escritores y artistas célebres nos brinda una ventana única a sus mundos creativos, permitiéndonos pisar el mismo suelo que una vez inspiró algunas de las obras más icónicas de la literatura y el arte. 

Desde cafés repletos de historia en París, donde los grandes pensadores debatían sus ideas revolucionarias, hasta bares ocultos en las calles de Barcelona, cada lugar ofrece una historia rica y una conexión palpable con el pasado. 

Esta búsqueda nos lleva a recorrer el globo, deteniéndonos en aquellos espacios sagrados donde la inspiración fluía libremente y donde, quizás, todavía lo hace. Acompáñanos en un viaje para descubrir uno de estos sitios emblemáticos, y quién sabe, tal vez encuentres un poco de inspiración propia en el camino.

El icónico Bar Marsella, el lugar favorito de Dalí, Hemingway y Picasso

El Bar Marsella, un icónico establecimiento ubicado en el corazón del barrio del Raval en Barcelona, ha sido durante dos siglos un punto de encuentro para algunas de las mentes más brillantes y creativas de la historia moderna. 

Desde su fundación en 1820, este bar ha servido como un santuario bohemio para figuras legendarias como Ernest Hemingway, Salvador Dalí y Pablo Picasso, quienes encontraron en sus rincones una fuente de inspiración y libertad creativa.

Conocido por ser el bar más antiguo de Barcelona, el Bar Marsella ha logrado preservar su espíritu original a lo largo de los años. Los visitantes hoy pueden sumergirse en un ambiente que evoca el pasado bohemio de la ciudad, rodeados de luces de época, botellas antiguas cubiertas de polvo y telarañas que adornan cada esquina, ofreciendo una experiencia casi intacta desde sus primeros días.

Más que un simple establecimiento, el Bar Marsella representa una pieza vital de la historia cultural de Barcelona, siendo un testigo silencioso de las conversaciones, ideas y noches inolvidables compartidas por algunos de los artistas y escritores más influyentes del siglo XX. 

A pesar de enfrentar desafíos, incluida una crisis financiera en 2013 que amenazó su existencia, la comunidad y el ayuntamiento de Barcelona se unieron para preservar este tesoro histórico, asegurando que siga siendo un punto de encuentro para futuras generaciones de artistas y amantes de la cultura.

El Bar Marsella no es solo conocido por su rica historia y clientela famosa, sino también por su especialidad en absenta, una bebida que fue popular entre los artistas parisinos a finales del siglo XIX y que sigue ofreciéndose en el bar con un ritual especial que incluye agua, un terrón de azúcar y un tenedor, ofreciendo a los visitantes una auténtica experiencia de la época.

Este establecimiento sigue siendo un testimonio viviente de la rica historia cultural de Barcelona, un lugar donde el pasado y el presente se entrelazan para ofrecer a los visitantes una experiencia única, recordándoles la importancia de preservar los espacios que han sido fundamentales en el desarrollo de la cultura y el arte a nivel mundial. Para aquellos en busca de un viaje al pasado bohemio de Barcelona, una visita al Bar Marsella es imprescindible.