

Recibir una herencia puede representar un alivio financiero, aunque también plantea un desafío debido a los impuestos asociados. No obstante, en 2025, muchas personas se beneficiarán de la exención del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, gracias a las nuevas bonificaciones implementadas en diversas comunidades autónomas.
De acuerdo con datos del Consejo General del Notariado, en 2023 se alcanzó un récord de 56.108 herencias rechazadas, lo que equivale a una de cada seis. La principal causa de este fenómeno ha sido la dificultad para afrontar los elevados costos fiscales que implica aceptar un legado patrimonial.

Exenciones fiscales en 2025 quiénes se beneficiarán
El Impuesto de Sucesiones y Donaciones presenta variaciones significativas en función de la comunidad autónoma, lo que ha dado lugar a notables desigualdades entre las distintas regiones.
En algunas de ellas, la carga fiscal se mantiene en niveles elevados, mientras que en otras se han implementado normativas más flexibles que favorecen a los contribuyentes.
Para el año 2025, las siguientes comunidades han establecido exenciones y bonificaciones relevantes:
- Andalucía: Los herederos pertenecientes a los grupos I e II (descendientes, ascendientes y cónyuges) estarán exentos de pago si la herencia no supera el millón de euros.
- Castilla y León: Se aplicará una reducción de entre 300.000 y 400.000 euros en la base imponible para descendientes, cónyuges, ascendientes y adoptantes.
- Madrid: Se otorgará una bonificación del 99% para los familiares directos. Los hermanos, sobrinos y tíos disfrutarán de descuentos menores.
- Galicia: Se establece una exención de hasta 400.000 euros para los herederos del grupo II.
- Islas Baleares: Se aplicará una bonificación del 100% para descendientes, ascendientes y cónyuges, mientras que los hermanos y otros familiares tendrán reducciones menos significativas.

Impuesto de Sucesiones y Donaciones: impacto en la recaudación y desigualdades
A pesar de que estas bonificaciones contribuyen a mitigar la carga fiscal para numerosos herederos, los especialistas advierten sobre las repercusiones en la recaudación estatal. Técnicos del Ministerio de Hacienda han indicado que esta medida podría beneficiar principalmente a los sectores más privilegiados. Esto ha reavivado el debate sobre la imperiosa necesidad de unificar el sistema impositivo a nivel nacional.
Por el momento, cada comunidad autónoma continuará administrando este tributo de forma independiente, lo que implica que las disparidades en el pago del impuesto seguirán generando notables contrastes según la ubicación del heredero.













