

La vitamina D es un nutriente esencial para el organismo. Participa en la absorción del calcio y, por tanto, en la salud de los huesos, además de tener un papel clave en el sistema inmunologico, la función muscular y neuronal.
Aunque puede obtenerse a través de alimentos como pescados azules, huevos y lácteos, y mediante la exposición solar, no todas las personas logran niveles adecuados solo con estos medios.

En algunos casos, la suplementación puede ser necesaria, pero su uso debe estar respaldado por un diagnóstico médico. Así lo recuerda el Ministerio de Sanidad, que ha lanzado una advertencia tras una alerta en Baleares: 16 personas fueron hospitalizadas con hipervitaminosis D luego de consumir un suplemento defectuoso adquirido por internet.
Los pacientes presentaron hipercalcemia, insuficiencia renal y arritmias. "Aunque la vitamina D cumple una función esencial en el metabolismo óseo y en la regulación del calcio, su uso debe ajustarse a criterios clínicos bien fundamentados, con el fin de evitar intervenciones ineficaces o potencialmente perjudiciales", alertan desde el gabinete de la ministra Mónica García.

Suplementos de vitamina D: cuándo están justificados
Sanidad es clara: no se justifica el cribado poblacional ni la medición rutinaria de niveles de vitamina D en personas sanas sin factores de riesgo. "La principal fuente de vitamina D en el organismo es la síntesis cutánea a partir de la exposición solar. Las guías clínicas coinciden en señalar que no está justificado el cribado poblacional ni la determinación rutinaria de niveles séricos de 25-OH-D en personas asintomáticas sin factores de riesgo específicos", señala el Ministerio.
Entre las situaciones clínicas en las que sí se indica medir o suplementar vitamina D se encuentran:
Pacientes con síntomas de déficit o trastornos del metabolismo óseo, como la osteomalacia.
Personas mayores institucionalizadas, con riesgo de caídas o fracturas.
Pacientes con enfermedades crónicas que interfieren con el metabolismo (insuficiencia renal o hepática grave, enfermedad inflamatoria intestinal, cirugía bariátrica).
Tratamiento con medicamentos que afectan la absorción o activación de vitamina D (glucocorticoides, anticonvulsivantes).
Sospecha de intoxicación por hipervitaminosis D.
Según la Academia Nacional de Medicina de EE. UU., niveles de 25-OH-D entre 12 y 20 ng/ml son suficientes para el 97,5% de la población. Por debajo de ese rango, puede justificarse la suplementación bajo supervisión médica, en dosis que oscilan entre 400 y 2000 UI/día según el cuadro clínico.
Alerta por un suplemento tóxico: 16 hospitalizados
El caso más reciente que motivó esta advertencia oficial tuvo lugar en mayo de 2025. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN)emitió una alerta tras confirmarse que 16 personas habían sido hospitalizadas en Baleares por consumir un suplemento defectuoso comercializado online bajo el nombre Advanced Vitamin X.
El Ministerio de Sanidad alertó además que "la suplementación innecesaria puede conllevar efectos adversos, especialmente cuando se exceden las dosis recomendadas. La evidencia disponible no sustenta de manera concluyente los beneficios no músculo-esqueléticos atribuidos a esta vitamina".
A esto se suman reportes previos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), que ya había documentado casos de sobredosificación grave tanto en adultos como en menores.
La retirada urgente del producto Advanced Vitamin x 90 capsules, lote 251268, de la marca Erix Elite Sport Nutrition espor contener una cantidad elevada de vitamina D, y provocar "reacciones adversas de diversa gravedad". En tanto, recomienda a"las personas que tengan en su domicilio productos afectados por esta alerta se abstengan de consumirlos".
Ya ha activado los protocolos para garantizar su retirada de los canales de distribución.
¿Los pacientes bajo tratamiento médico deben alarmarse?
El Grupo de Trabajo de Osteoporosis y Metabolismo Mineral de la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) también se pronunció para brindar tranquilidad a quienes reciben tratamiento prescrito:"Los casos descritos no corresponden a pacientes que se encuentren bajo tratamiento médico prescrito con vitamina D."
"Las personas afectadas eran individuos sanos que consumieron suplementos dietéticos adquiridos en tiendas no farmacéuticas, sin indicación, ni control sanitario y en niveles supra terapéuticos", aclararon.
Desde SEMI insisten en que el tratamiento con vitamina D es seguro siempre que sea indicado por un profesional de salud. "El tratamiento debe ser prescrito por un profesional que realice el control pertinente y ajuste de dosis para obtener niveles adecuados. El tratamiento indicado por profesionales sanitarios es seguro, siguiendo las dosis recomendadas por las guías clínicas", concluyen los internistas.















