

En España, el emprendimiento se ha convertido en una opción cada vez más apreciada entre las salidas profesionales posibles. Son los jóvenes sobre todo quienes impulsan esta idea que prioriza la independencia laboral y la creación de proyectos propios.
Son muchos los autónomos que argumentan que el camino del emprendimiento se encuentra plagado de riesgos, sacrificios y desafíos. Pero todos los emprendedores que cuentan sus experiencias comparten algo en común: las ganas y el esfuerzo por sacar adelante un proyecto.
Este es el caso de Marco Bermúdez, un niño de 14 años que ya acumula experiencia en tres proyectos empresariales y lleva dentro una energía que lo empuja a seguir creando. Mientras muchos de sus compañeros le dedican su tiempo a divertirse, él piensa en crear nuevas soluciones para problemas reales. En una entrevista para Antena 3, el empresario contó sus inicios como emprendedora y la realidad que poca gente cuenta detrás de inventar una empresa.

La historia completa del empresario de 14 años
El joven emprendedor comenzó a intentarlo en el mundo empresarial a los ocho años mientras estudiaba en Genius School, una escuela enfocada en despertar vocaciones emprendedoras desde la temprana edad. Allí, Bermúdez ideó su primer proyecto: diseñar un robot humanoide.
Aunque el emprendimiento no funcionó como esperaba, lo transformó en una experiencia de aprendizaje. "A los 8 años supe lo que es el fracaso", afirma. Pero lejos de desanimarse, siguió adelante con nuevos retos y las cosas empezaron a tornarse a su favor.
A los 10 años invirtió en su primera impresora 3D y con ella llevó a cabo su primera iniciativa rentable: "ThreeDimensional", empresa que produce objetos como llaveros y letreros utilizando impresión 3D con materiales vegetales. Gracias a este emprendimiento, Marco obtuvo ingresos de entre 7.000 y 10.000 euros.
"Mucha gente piensa que no hago cosas de niño, pero sí. He aprendido a compaginar elser un niño con ser emprendedor", cuenta Bermúdez. "En mis ratos libres es cuando me pongo a trabajar", sentencia.

Las críticas del empresario de 14 años para el sistema educativo actual
Marco Bermúdez está en tercero de la ESO y reconoce que "en clase me aburro como se aburre todo el mundo". Desde su punto de vista, esto sucede porque "la educación hoy en día no está preparada para lo que se necesita", ya que debería ser más práctica y menos teoría.
El joven considera, por ejemplo, que "me deberían empezar a enseñar Inteligencia Artificial que, al fin y al cabo, no es el futuro, sino que es el presente. Que no me lo estén enseñando quiere decir que está desfasada para lo que se debe requerir".
Por otro lado, sus padres le dicen que estudie una carrera, algo con lo que está completamente de acuerdo. "Tengo la idea de hacer una carrera y la voy a mantener. No sé bien qué, pero algo tendré que hacer por si esto no sale bien. Al fin y al cabo es educarte en otros campos", reconoció.
La recomendación del joven empresario para otros emprendedores
Además de ese primer éxito y sus dos intentos anteriores, el joven está desarrollando una cuarta iniciativa: "Smart Bridge", un software de ingeniería civil que optimice el diseño de puentes con inteligencia artificial. Para avanzar necesita financiación, y ha manifestado abiertamente que está en busca de 250.000 euros para materializar la idea.
En noviembre de 2024, en entrevista para el medio El Comercio, Bermúdez explicó por qué se animó a emprender y citó una frase de Steve Jobs que lo motiva todos los días: "Estamos aquí para darle un mordisco al Universo. Si no, ¿para qué otra cosa podríamos estar aquí?".
"Es la satisfacción de crear algo propio, te llena muchísimo. La capacidad de hacer algo por la sociedad es lo que me motiva", comentó el joven emprendedor. Su recorrido, desde los tropiezos iniciales hasta los primeros ingresos y la ambición tecnológica, inspira por su claridad y determinación a una muy temprana edad.
















