Esta es la relación entre los ronquidos y las fases del sueño y qué significa para mi salud

Roncar es una actividad que afecta a muchas personas, y aunque a menudo se considera una molestia menor, puede ser indicativo de problemas de salud más graves. La relación entre los ronquidos y las fases del sueño es compleja, pero fundamental para entender su impacto en nuestra salud.

Los ronquidos se producen cuando las vías respiratorias se estrechan, causando vibración en los tejidos de la garganta al respirar. Este fenómeno puede variar en frecuencia e intensidad dependiendo de la fase del sueño en la que se encuentre una persona. 

Durante el sueño, pasamos por varias fases: el sueño ligero (N1), el sueño más profundo (N2), el sueño de ondas lentas o profundo (N3) y el sueño REM (movimiento ocular rápido). Cada una de estas fases tiene características distintas y afecta de manera diferente la aparición y el tipo de ronquido.

Las fases del sueño y los ronquidos

De acuerdo a The Sleep Foundation, en las fases N1 y N2, el cuerpo comienza a relajarse y el ritmo respiratorio disminuye, lo que puede facilitar el ronquido debido al estrechamiento de las vías respiratorias. 

En la fase N3, o sueño profundo, el cuerpo se encuentra en un estado de relajación máxima, lo que puede hacer que los tejidos de la garganta se relajen aún más, potenciando los ronquidos. 

Sin embargo, durante la fase REM, donde ocurren la mayoría de los sueños, la actividad cerebral aumenta y el tono muscular disminuye, lo que paradójicamente puede reducir la frecuencia de los ronquidos a pesar de una mayor probabilidad de colapso de las vías respiratorias.

El ronquido durante estas fases no solo afecta a la calidad del sueño del roncador, sino también a la de sus compañeros de cama, causando interrupciones y reduciendo la eficiencia del descanso. 

Además, el ronquido frecuente y fuerte es un síntoma común de la apnea obstructiva del sueño (AOS), una condición en la que las vías respiratorias se bloquean repetidamente durante la noche, interrumpiendo la respiración y disminuyendo los niveles de oxígeno en la sangre.

Impacto en la salud de los ronquidos

El ronquido persistente puede tener consecuencias graves para la salud. La apnea del sueño no tratada está vinculada a un mayor riesgo de hipertensión, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y accidentes cerebrovasculares. Además, la AOS puede causar somnolencia diurna excesiva, lo que aumenta el riesgo de accidentes y afecta la productividad y la calidad de vida en general, dicen desde The Sleep Foundation.

El diagnóstico y tratamiento de los ronquidos y la apnea del sueño son cruciales para prevenir estas complicaciones. Los tratamientos pueden variar desde cambios en el estilo de vida, como perder peso y evitar el alcohol, hasta el uso de dispositivos de presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP) y, en algunos casos, cirugía.