Las antiguas civilizaciones siempre han despertado fascinación, pero también asombro por sus prácticas religiosas y rituales extremos. Un reciente descubrimiento reveló la razón hasta este momento oculta del sacrificio masivo de niños en el Templo Mayor de México.
La cultura mexica, una de las más emblemáticas de Mesoamérica, fue la responsable de esta ofrenda que, al parecer tuvo como objetivo aplacar la furia de Tláloc y de los tlaloques, deidades mitológicas.
Descubrimiento: ¿cuál fue la razón del sacrificio masivo de niños en el Templo Mayor de México?
Si bien en aquella época los sacrificios a los dioses eran recurrentes, la magnitud de esta ofrenda llamó poderosamente la atención de los investigadores.
Finalmente, se descubrió que la ofrenda de niños en honor al dios Tláloc tuvo como contexto una importante crisis climática, ocurrida hace más de 500 años y que sigue siendo objeto de debate por las implicaciones sociales y espirituales que tuvo. El dios Tláloc era el responsable de las lluvias.
Conocida como la Ofrenda 48 del Templo Mayor se dio en un contexto específico, según los arqueólogos responsables del descubrimiento. De acuerdo con su teoría, la práctica estaba relacionada con la búsqueda de alivio ante una sequía que devastó la cuenca de México en el siglo XV.
De acuerdo con la investigación, entre 1452 y 1454 habría tenido lugar la mencionada crisis climática que desencadenó una hambruna generalizada y un deterioro considerable de las cosechas.
Por otra parte, Leonardo López Luján, director del Proyecto Templo Mayor, comentó que las heladas de otoño fueron un agravante más, ya que destruyeron los cultivos de maíz antes de su maduración.
¿Cómo son los restos encontrados en el Templo Mayor de México?
Los restos óseos encontrados pertenecen a niños de entre 2 y 7 años, cuidadosamente dispuestos en capas sobre arena marina. No obstante, hubo algunas diferencias significativas entre los cuerpos según su ubicación.
Los primeros estaban decorados con collares y cuentas de jade; mientras que los superiores fueron cubiertos con pigmento azul y acompañados de ofrendas simbólicas, como:
- Esculturas de tezontle con el rostro de Tláloc
- Elementos marinos
- Navajas de obsidiana.
En los últimos análisis se pudo ver que muchos de los niños sufrían de malnutrición, reforzando la hipótesis de la hambruna. Por su parte, los objetos ceremoniales reflejan la intención de conectar estos sacrificios con la fertilidad de la tierra y el agua.