Descubrimiento arqueológico cambia para siempre el tratamiento de los dolores: revelan la planta medicinal más antigua

Un equipo internacional de investigadores ha descubierto en un sitio arqueológico conocido como la cueva de las Palomas, en la zona de Tafugalt, evidencias de la práctica medicinal más antigua, datada en hace 15.000 años. Este hallazgo, publicado en la revista científica Nature, resalta el uso de la planta ephedra, cuyos frutos fueron encontrados en una zona destinada a inhumaciones.

El Instituto Nacional de Ciencias de la Arqueología y del Patrimonio (INSAP) ha indicado en un comunicado que la planta ephedra se utilizaba para curar hemorragias y aliviar dolores. Este descubrimiento revela que los grupos humanos de Tafugalt tenían un conocimiento avanzado sobre el uso de plantas medicinales, mucho antes del Neolítico, el periodo en el que comenzó la agricultura.

 ¿Qué evidencia se encontró en la cueva?

Las investigaciones previas en la misma cueva también han descubierto un cráneo humano con signos de trepanación, considerada la más antigua del mundo y datada en hace 15.000 años. Este cráneo muestra señales de cicatrización, lo que indica que el individuo sobrevivió a la operación, lo que sugiere prácticas médicas complejas para su tiempo.

 ¿Cómo cambia este hallazgo nuestra comprensión de la medicina prehistórica?

El equipo de investigación incluye, además del INSAP, a expertos de las universidades de Las Palmas (España), Oxford (Reino Unido), Mohammed I (Marruecos) y del Museo de Historia Natural de Londres. Este descubrimiento confirma que los grupos humanos de Tafugalt ya utilizaban plantas medicinales de manera efectiva, desafiando nociones anteriores sobre el desarrollo del conocimiento médico en la Prehistoria.