Armani y Dior, en problemas: los acusan de "trabajo esclavo" para fabricar sus productos mas caros
Investigaciones revelan condiciones laborales abusivas en la producción de artículos de lujo de reconocidas marcas de moda.
Un reciente informe del Wall Street Journal sobre una serie de redadas en Italia ha destapado preocupaciones sobre la explotación laboral en la producción de artículos de lujo, generando un intenso debate en las redes sociales y críticas por parte de los usuarios.
Condiciones laborales bajo la lupa
Según el informe, una investigación de los fiscales de Milán sobre las condiciones de trabajo en fábricas locales descubrió que los talleres que producían bolsos y otros artículos de cuero para Dior y Armani utilizaban mano de obra extranjera explotada para fabricar estos productos de alta gama a una fracción de su precio de venta.
Los documentos judiciales revelan que Dior pagaba a un proveedor 53 euros por pieza para ensamblar un bolso que se vende en tiendas por 2600 euros, mientras que los bolsos de Armani eran vendidos a un proveedor por 93 euros, revendidos a Armani por 250 euros, y finalmente vendidos en tiendas por alrededor de 1800 euros.
Repercusiones legales y sociales
Las redadas se llevaron a cabo en talleres ubicados en Italia, que también producían artículos para otras marcas de moda. Fabio Roia, presidente del sistema judicial de Milán, cuestionó la baja coste de fabricación de estos productos, instando a las marcas a reflexionar sobre esta cuestión.
Los fiscales de Milán han investigado durante una década las condiciones laborales ilegales en sectores como la logística y los servicios de limpieza antes de enfocarse en el sector del lujo, donde Italia representa la mitad de la producción mundial.
Las firmas de lujo deberían intensificar los controles sobre sus proveedores para asegurar que respeten las leyes laborales, según propuestas de la corte de justicia de Milán tras investigaciones sobre explotación laboral que involucraron a unidades de LVMH y Giorgio Armani.
Este esquema, aunque no vinculante legalmente, busca abordar lo que los magistrados describen como "un método de fabricación generalizado" que pone en riesgo la vida de las personas para aumentar los márgenes de beneficio.
Reacciones de las marcas
En años recientes, muchas marcas de lujo y moda rápida han enfrentado críticas por acusaciones de explotación laboral y uso de trabajo infantil en algunas naciones del sur de Asia, con el fin de aumentar sus márgenes de beneficio.
Dior, propiedad del gigante del lujo LVMH, declinó hacer comentarios al WSJ pero presentó un memorando con medidas para resolver los problemas en su cadena de suministro. Armani, por su parte, afirmó tener medidas de control y prevención para minimizar abusos en la cadena de suministro y aseguró estar colaborando con total transparencia con las autoridades.
Escándalos sobre condiciones laborales inhumanas han afectado a la industria de la moda durante mucho tiempo, especialmente en fábricas de países en desarrollo. Sin embargo, las redes sociales han incrementado los riesgos reputacionales para las marcas, llevando a muchas a internalizar parte de la producción y reducir el número de subcontratistas.