La sensación positiva que le dejó al Gobierno el resultado de la PASO bonaerense se extendió durante la semana posterior a la elección. Pero ya quedó atrás. En Casa Rosada perfilan un septiembre que apunte a octubre y no que se relaje en agosto. Y se proponen como meta "ganar la elección aunque sea por un voto", para no permitir un fin de año con Cristina Fernández de Kirchner asumiendo su banca en el Senado sabiéndose triunfadora del comicio legislativo y de cara al presidencial 2019.


"Ahora no hay margen de error, perder en octubre puede complicar mucho el crecimiento que venimos proyectando", reconocen en Balcarce 50. Es que las expectativas oficiales para las PASO se cumplieron, aun cuando admiten que el recuento definitivo que se conocerá en las próximas horas oficializará como ganadora, por un margen muy estrecho, a la ex presidenta.

"Ganamos, aunque perdamos", describen, y repasan los datos favorables que arrojó la economía el día siguiente a la elección, con una baja del dólar que se sostiene hasta hoy y un alza en la Bolsa.

Hacia octubre, el cambio de escenario parece evidente. La fórmula para senador que encabeza Esteban Bullrich sacó chapa de favorita para quedarse con la mayor parte de los casi dos millones de votos que cosecharon Sergio Massa (15,5%) y Florencio Randazzo (5,8%). De acuerdo a diferentes sondeos realizados la semana pasada, el votante de Massa que cambie su voto en octubre optaría, predominantemente, por Bullrich en lugar de Cristina. En el caso de Randazzo, el traslado del sufragio sería hacia la candidata de Unidad Ciudadana, aunque por el caudal de votos en juego, el peso del votante de Massa inclinaría la elección a Bullrich.

En el Gobierno argumentan que en los próximos comicios influirá un factor clave,que también favorecerá a Bullrich. "Se pondrá en evidencia el temor que mucha gente tiene", dicen, en referencia a la posibilidad de que, si gana Cristina, "vuelva a un país que remite constantemente al pasado".

El denominado efecto temor, creen en Casa Rosada, decidirá a muchos que no votaron a Cambiemos en la PASO a mover su voto hacia el oficialismo.

Como sucedió en la previa de las Primarias, Macri volverá a ser protagonista activo en la campaña, que comienza el 17 de septiembre.

Aunque con un matiz: esta vez, en lugar de fortalecer el ya sólido triunfo a nivel nacional, se enfocará en la provincia de Buenos Aires.

Un signo de ello es que hoy se reunirá en Casa Rosada con la gobernadora María Eugenia Vidal y un grupo de mujeres que encabezan pymes industriales.

El tándem Macri-Vidal se mostrará junto con mucha frecuencia, para anuncios de inversiones u obras, o para eventos sociales. El viernes pasado, por caso, visitaron a un boxeador que da clases gratuitas a jóvenes y adultos en José León Suárez.