

El jefe de Gobierno y precandidato a presidente Mauricio Macri no fue a ver a una bruja. “No creo en ese tipo de cosas”, aclaró hoy, saliendo al cruce de lo que publicaron algunos medios. Lo que sí dijo es que en algún momento visitó a una “armonizadora budista” que lo ayudó a conectarse consigo mismo.
“Están con mucho sentido del humor. La verdad que no. No me dedico ni consulto, no creo en ese tipo de cosas, creo en el trabajo de todos los días”, respondió esta mañana Macri cuando, por radio Vorterix, le preguntaron si había visitado a una bruja llamada Shirley Barahona.
De hecho, la propia Barahona, chamana y vidente colombiana, confirmó hoy por radio Del Plata que no le hizo “ningún trabajo al seño Mauricio Macri” y que no lo conoce a él “ni a ninguno de sus asesores”. “Es mi deber aclarar esta situación para que no tomen mi nombre para escudarse escudar en cualquier cosa que vayan a hacer”, agregó, al tiempo que dijo que si trabajara “con la política (…) lo cobraría carísimo y nunca lo contaría públicamente”.
Lo que Macri sí hizo, según él mismo contó en una entrevista que difundió Magdalena Ruiz Guiñazú la semana pasada, fue visitar a una “armonizadora” con la que realizó terapia de cuencos y de gongs.
“La grieta me tomó como uno de los principales victimarios. Uno de mis colaboradores me propuso incorporar a una armonizadora budista. Y la verdad es que me hizo mucho bien. Me ayudó a conocerme a mí mismo, a liberar energías que uno tiene adentro”, describió el jefe de Gobierno.
“Es una líder budista que te ayuda a reflexionar y te genera, a través de los cuencos tibetanos y los gongs, la capacidad de conectarte con vos mismo y con partes de tu cerebro que tal vez no utilizas. El ser humano utiliza una pequeña parte de su inteligencia, y esta meditación, esta reflexión, te ayuda a conectarte con más áreas que te amplían tu capacidad de dar y recibir y ser feliz”, explicó el líder del PRO.
Por radio Del Plata y en diálogo con Marcelo Zlotogwiazda, la armonizadora Verónica Burutarán profundizó sobre la terapia de gongs: “Con los sonidos armónicos de los instrumentos, la mente hace como una especie de silencio al que uno no está acostumbrado y empezamos a sentir cosas que no escuchábamos de nosotros mismos, uno empieza a conocerse mejor, saber lo que quiere”.
“Nosotros –prosiguio Burutarán- somos energía que está vibrando. Todo es energía y la energía vibra. Los sonidos armónicos son puros, existen en la naturaleza de esa manera, es una proporción; Pitágoras desarrolló la escala, es la proporción áurea, todas las cosas de la naturaleza tienen esa proporción y el orden que tienen los armónicos del sonido respeta esa proporción y hace que nuestras células recuerden su orden natural”.
Por su parte, Barahona, la chamana colombiana a la que –según ambos- Macri no visitó, contó que si el jefe de Gobierno la hubiese consultado, le habría advertido que se cuidara, porque ve a futuro un atentado contra su persona. “Tiene que ser muy cuidadoso con su discurso –dijo- Que se cuide y que le pida al Papa que lo cuide (…) Tiene que tener un sistema de seguridad muy grande, porque está lleno de enemigos”.
La vidente también habló del futuro de Argentina: dijo que “se vienen cambios muy fuertes y que no les va a servir de nada escudarse con un brujo o bañarse en agua bendita”, y que “la gente va a estar muy en desacuerdo con los ajustes fiscales que va a haber en el país”.













