

Luego de idas y venidas, el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, definió los nombres que presentará ante la Legislatura porteña para que ocupen las dos bancas vacías del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) que dejaron la renuncia de Ana María Conde y la muerte de José Osvaldo Casás.
Se trata de los juristas Santiago Otamendi, quien actualmente se desempeña como secretario de Justicia, secundando al ministro nacional de esa cartera, Germán Garavano; y Marcela De Langhe, actual titular del Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP), en donde se forman los cadetes de la Policía de la Ciudad.
Otamendi es juez de Primera Instancia en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad, en uso de licencia, mientras De Langhe es magistrada en la Cámara en lo Penal, Contravencional y de Faltas en el distrito.

Otamendi, aprobado por las espadas judiciales del macrismo, ganó la carrera.

Con la venia radical, la titular del instituto de formación policial ocupará un lugar en el TSJ.
Enroque de piezas
Con estos nombres en la mesa, Rodríguez Larreta debió sacrificar a otra figura que era más de su preferencia personal: la abogada Marcela Basterra, presidenta del Consejo de la Magistratura. Primó, al interior del PRO, la figura de Otamendi, que fue ungido por los alfiles judiciales del presidente Macri.
De Langhe, en tanto, llegaría al tribunal gracias al apoyo del bloque legislativo de Martín Lousteau, Evolución, que cuenta con seis escaños en el hemiciclo porteño y completaría con los 34 del oficialista Vamos Juntos, la necesaria mayoría calificada de dos tercios para nominar a los jueces.
De Langhe tiene el respaldo de la UCR porteña, y del presidente de Boca Juniors e influencer judicial, Daniel Angelici. También el ex ministro de Justicia y Seguridad, Martín Ocampo, le dio su aval en nombre del centenario partido.
Apartado del cargo tras el escándalo que provocó el ataque al ómnibus de Boca en la tarde que se jugaría en Núñez el partido de vuelta de la Súperfinal de la Copa Libertadores, el ex ministro Ocampo definió esta semana dejar su cargo de fiscal general de la Ciudad, que retenía aún por una licencia.
En su lugar, el Ejecutivo porteño propuso a Juan Bautista Mahiques, actual subsecretario de Asuntos Penitenciarios y Relaciones con el Poder Judicial y la Comunidad Académica en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, y además representante del Poder Ejecutivo en el Consejo de la Magistratura nacional.
Según expresó el larretismo desde Parque Patricios, a partir de la publicación de las candidaturas en el Boletín Oficial habrá diez días para presentar adhesiones o impugnaciones y, una vez transcurrido ese período, se podrá enviar el pliego a la Legislatura para su aprobación final.












