El Gobierno realizará un encuentro entre el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, y legisladores de La Libertad Avanza el próximo martes 9 de diciembre para que el funcionario explique las reformas estructurales que se tratarán en las sesiones extraordinarias.
Así lo confirmaron diversas fuentes del oficialismo a El Cronista. Según precisaron, la reunión se llevará a cabo en la previa de la presentación del documento del Consejo de Mayo, que elevará un informe final explicativo de lo trabajado durante el año en los encuentros mensuales en la Casa Rosada.
Ese mismo día es cuando el Gobierno planea enviar el texto final de las reformas. Sturzenegger, por caso, ofició de representante del Ejecutivo en el Consejo, y además es quien llevó adelante la redacción del proyecto de modernización laboral. En tanto, la reforma tributaria se concentró en el área de Economía que maneja el ministro Luis Caputo.
Al encuentro del martes, que aún no definieron si será en el Congreso o en Balcarce 50, lo acompañarán también el secretario de Desregulación, Alejandro Cacace, y el secretario de Transformación del Estado, Maximiliano Fariña, quienes además ya mantuvieron reuniones con diputados este martes.
No solo se tratará de una formalidad por la inauguración de las reformas, sino que también forma parte de la “capacitación” que el Gobierno llevó adelante desde la campaña para que los electos defiendan la agenda del presidente Javier Milei en el Congreso.
Tanto el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, como la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, organizaron encuentros internos para enseñar sobre técnica legislativa. Algunos incluso contaron con la participación del propio jefe de Estado en la Quinta de Olivos y Casa Rosada tiempo atrás.
Se prevé que las reuniones técnicas entre poderes también se lleven adelante en otras áreas como Salud: El Cronista supo que el ministro Mario Lugones también tiene intenciones de trabajar en la agenda con los diputados y senadores.
Por ahora, la prioridad serán los proyectos que se tratarán en extraordinarias, en los cuales el oficialismo espera lucirse con la amplia representación que contará en ambas Cámaras a partir del 10 de diciembre. De esta manera, el Gobierno se quiere asegurar de que los legisladores puedan contar con las herramientas técnicas para defender y explicar el espíritu de los proyectos ante un debate que, por meses, polarizará el Congreso.
Los puntos principales de la reforma laboral
El Gobierno espera hasta que este martes para dar a conocer la versión oficial del proyecto de modernización laboral, pero mientras tanto ya comenzó a filtrarse un borrador que brindó más detalles sobre por dónde va a estar orientada la reforma.
En este texto excluye a los empleados públicos, los trabajadores agrarios y los independientes en el ámbito de plantación de la norma. Además, se delimita la definición del Concepto del Trabajo, el principio de la norma más favorable para el trabajador y la aplicación de la ley sin retroceder en la letra protectora.
Entre los platos fuertes del texto está la creación de un régimen de compensación de horas extras, con sistemas de banco de horas, francos compensatorios y otros métodos de control de horas trabajadas que, en esencia, desplaza el foco de pago inmediato con recargo hacia esquemas de compensación en el marco del respeto de los descansos mínimos legales.
A su vez, flexibiliza el uso de vacaciones y permite que el empleador y trabajador acuerden fraccionar las vacaciones, con cada tramo no menor de 7 días. Como contrapeso agrega la obligación de que el empleador le otorgue vacaciones en el período de verano al menos una vez cada tres años al trabajador.
Con respecto de la antigüedad, el proyecto mantiene la fórmula general de 1 mes de sueldo por año de servicio o fracción mayor de 3 meses sobre la base de la mejor remuneración mensual, normal y habitual del último año, y convalida por ley la doctrina “Vizzoti” que fijó el criterio de que el tope no puede reducir la base en más de un 33%. Como contrapeso, abre la puerta al Fondo de Cese Laboral que implica un mecanismo de ahorro para indemnizaciones con aportes mensuales.
Para “combatir” el trabajo no registrado, el proyecto propone crear un Régimen de Incentivo a la Formalización Laboral (RIFL) que le otorga beneficios a los empleadores que incorporen nuevos trabajadores registrados por el plazo de un año desde la vigencia de la ley. Se trata de uno de los puntos que no se termina de desarrollar en detalle en cuanto a cómo quedará el régimen de multas.
Otro punto de ruptura con el régimen actual refiere a los trabajadores de plataformas digitales y repartidores, los cuales no están contemplados en la Ley de Contrato de Trabajo vigente por lo que son considerados asalariados. El texto declara que los “trabajadores independientes de plataformas” quedan afuera de la LCT y establece un régimen especial con ciertas protecciones -libertades- pero sin relación de dependencia.
En tanto, sobre lo referido al ámbito gremial, el proyecto endurece las condiciones para conflictos colectivos al aumentar los rubros que se consideran servicios esenciales, fortalece la regulación y sanción de conductas sindicales consideradas abusivas, e introduce competencia entre sindicatos al permitir que organizaciones internas de empresa accedan a personería. No introduce nada sobre la eliminación de las cuotas solidarias, como se había especulado.
De todos modos, en el Gobierno reconocieron que este primer borrador no es el definitivo y que van a haber más cambios introducidos en el proyecto. Todo se define el 9 de diciembre.