Termina una semana pródiga en buenas noticias, a pedido expreso del jefe de Gabinete, Juan Manzur, al cuerpo de ministros, que incluyó varios anuncios de medidas económicas con impacto directo en el bolsillo, como la aprobación del nuevo salario mínimo más el aumento del piso no imponible de Ganancias.
Sin embargo, algunas cuentas siguen pendientes tras la encarnizada crisis interna que atravesó el gobierno de Alberto Fernández por los malos resultados del Frente de Todos en las elecciones PASO. Es el caso de Andrés 'Cuervo' Larroque, ministro de Desarrollo de la provincia de Buenos Aires,líder de La Cámpora y uno de los delfines políticos de Cristina Kirchner.
¿Qué pasó? En declaraciones radiales, le mandó un fuerte mensaje a Martín Guzmán, quien aseguró esta semana que "no hubo ajuste fiscal sino una reducción del déficit, que es distinto", y así refutó las críticas de la vicepresidenta en la carta que hizo explícita la fractura en el Gobierno.
"No creo que haya que entrar en discusiones tecnicistas o de carácter académico. Más allá de las nomenclaturas que se elijan estamos en un contexto que no nos permite amarretear frente a la necesidad de la gente", disparó Larroque.
Y enfatizó la necesidad de "dejar atrás las falsas discusiones que dan una imagen de enredo al interior del Gobierno, y que no terminan decantado en las soluciones que nos piden".
En ese punto, el funcionario bonaerense aseguró que el ministro de Economía debería haber sostenido el IFEo algún otro tipo de programa de asistencia social para aliviar la crisis económica que se agravó con la pandemia. "Hubo discusiones, pero primaron las miradas de carácter fiscal", acusó.
"Donde hay una necesidad, hay un derecho. Y el Estado tiene que reparar las asimetrías que se generan en una economía de mercado como la que transitamos. Somos de la idea de políticas que nivelen y equiparen. La nave insignia es la Asignación Universal por Hijo", ejemplificó.
Para Larroque, "enfrentar una crisis económica y social y una pandemia sin responsabilidad, sin los instrumentos para resolver con la celeridad necesaria, complica".
El kirchnerista de paladar negro reconoció que "el mensaje de las urnas fue claro, y estamos en una fase de transición, donde no terminamos la pandemia, pero tampoco se consolidó la reconstrucción". Por eso, dejó de lado las especulaciones sobre ganadores y perdedores con los cambios en el Gabinete, que juzgó necesarios para "ampliar el Gobierno en un momento complicado".