Los precios de los combustibles se cuatriplicaron entre diciembre de 2023 y abril de 2025. Fue por dos razones: acompañar la devaluación del peso frente al dólar -cuando arrancó la gestión de Milei- y que los importes de los surtidores locales reflejen el valor del barril de petróleo crudo a nivel internacional.

Sin embargo, desde que arrancaron los aranceles en Estados Unidos, el barril del petróleo también fue golpeado: la variedad Brent -que es la referencia local- estaba en u$s 74, mientras que por estas horas cotiza en u$s 64. Es una caída del 15%.

¿Llegará esa caída del 15% a los surtidores locales?

Salvo en octubre -donde hubo un descenso del 1%-, las remarcaciones en los surtidores se hicieron todos los meses. Fueron por la suba del petróleo crudo a nivel internacional, la variación del dólar oficial (2% mensual) y actualizaciones impositivas.

Ya hubo una caída de precios en los surtidores en octubre. Fue porque el petróleo había retrocedido durante el mes anterior.

"Para determinar los precios, se toma un promedio de la cotización del barril de petróleo durante todo el mes", explican en una petrolera. "No se toma el promedio de unos días, o una semana, la evaluación es mensual", detallan las compañías.

El principal componente en el importe de las naftas es el petróleo crudo, que es la materia prima. El aumento de la inflación, el dólar o los impuestos también pesan en el número final, pero nada es tan decisivo como el barril de petróleo.

De esa forma, una reducción en la cotización del petróleo podría llevar a un descenso en los precios en surtidores. "Aunque la inflación sea del 3%, y la devaluación del 2%, con una caída del 15% en el principal componente entiendo que los precios deberían bajar", razona un estacionero que pidió no ser identificado.

Durante 2024, YPF logró que los precios locales reflejen el "export parity", es decir que los importes locales estén alineados con los valores de petróleo de exportación. Esa fórmula es utilizada en la mayoría de los países. En la Argentina hubo varios intentos para instaurarla (por parte de Miguel Galuccio y Miguel Gutiérrez, ambos ex presidentes de YPF), pero nunca se terminó de plasmar hasta la actual gestión.

El promedio de la nafta súper se ubica por arriba de los $ 1350, lo que representa un alza del 45% con respecto al valor que tenía hace un año. La premium está bordeando los $ 1590, una suba del 40% en relación a un año atrás.

El gasoil común merodea los $ 1300 y está 30% más caro que hace un año. Una relación similar guarda el gasoil premium, en una zona de $ 1550, un 31% más caro que hace un año.

Las ventas de nafta no vienen de atravesar un 2024 positivo. Los estacioneros hablan de casi 16 meses de retrocesos en los volúmenes que despachan.

Según cifras de la secretaría de Energía, a las variedades "premium" les viene yendo algo mejor.

En los datos que publica la secretaría de Energía -hasta febrero-, hubo una caída del 0,5% en 2025 contra 2024. En los números fue mayor, pero febrero de 2024 tuvo 29 días, lo que modifica la base de comparación.

Las ventas cayeron un 20% en 2024, considerado uno de los más bajos en mucho tiempo. El pico alcista tuvo lugar en 2017, donde los estacioneros llegaron a niveles récord.

"Hubo más caída en los productos 'comunes' que en los 'premiums'. Si bien los premiums representan menor cantidad, son más caros y tienen mayor margen. Eso alivianó de alguna manera el descenso que tuvimos", detalla un estacionero.

La ciudad de Buenos Aires viene escapando del bajón en el despacho. Durante 2024, solo retrocedió un 1%, una caída mínima en comparación con otras provincias.

YPF lidera el mercado de despacho de combustibles, con un 55% de participación. Shell y Axion se suelen disputar el segundo puesto, con números muy parejos. La marca Puma (del trader Trafigura) está consolidándose en el cuarto lugar.

La provincia de Buenos Aires es el mayor mercado para el despacho de combustibles. Su volumen quintuplica al de la ciudad de Buenos Aires. El comportamiento fue desparejo, con una caída más profunda en los partidos del conurbano que en las ciudades del interior bonaerense.

Córdoba es la segunda plaza más importante del país (casi un tercio que la provincia de Buenos Aires), y el bronce es para Santa Fe.

Un análisis del comportamiento nacional muestra que las provincias más afectadas con las caídas en el despacho son; Formosa (retroceso de 27%), Misiones (bajó un 25%), Corrientes (20% menos). En cambio, Río Negro (con 4,35 %) y Tierra del Fuego (con 4,35 %) son las que menos cayeron.