Por una cuestión reglamentaria, fracasó la sesión de ayer en el Senado. Más allá de la discusión sobre qué tema tratar primero y cuántos votos se necesitan para modificar el orden del día, quedó en evidencia que el Frente de Todos perdió el dominio en la Cámara que lidera Cristina Kirchner.La oposición aprovechó para hacer una demostración de fuerza.
En el medio, quedaron los familiares de víctimas de accidentes de tránsito y de Lucio Dupuy, que esperaban que se sancione la Ley de Alcohol Cero al Volante y aquella que busca prevenir la violencia infantil, respectivamente. También quedaron colgados del pincel quienes se ilusionaban con que la Lengua de Señas sea reconocida como idioma en todo el territorio argentino.
El temario no dividía aguas entre oficialismo y oposición. O, al menos, no fue el meollo de la cuestión: había diferencias en Juntos por el Cambio en torno a la votación de la ley de alcohol cero al volante. Uno de sus principales opositores es el jefe de Juntos por el Cambio, Alfredo Cornejo. Pero, se sabe, en el Frente de Todos la ley también tiene sus detractores.
El trasfondo fue que el Frente de Todos se comportó como si siguiera reteniendo aquella mayoría que perdió en las elecciones del 2021. Durante el 2022, logró paliar los efectos de la derrota gracias a tres aliados incondicionales. Las concesiones a ese tridente para poner en marcha la Cámara venían surtiendo efecto, hasta que el mes pasado, cuatro de los propios dieron el portazo; sus propuestas venían siendo desatendidas por la presidenta del Senado.
La contracara fue que Juntos por el Cambio se alió con el flamante bloque, Unidad Federal, y dejó en claro que 38 son más que 34. O, como dijo desde su banca Luis Naidenoff, jefe del bloque UCR, "las mayorías y minorías van y vienen".
Y, la oposición, que desde hace tres años se encuentra en minoría y rechaza la agenda del Gobierno en el Senado, en espacial el paquete de proyectos judiciales, no quiso dejar pasar la oportunidad de marcarle la cancha al oficialismo. Dejó sin quórum al Frente de Todos en medio de la sesión. Es la primera vez que ocurre. Hasta ahora, cuando el oficialismo dudaba de si contaba con los números para sostener el debate, no convocaba a sesión.
Pero además le "puso un freno" a un oficialismo que, según denuncian en Juntos por el Cambio, incumplió el reglamento de la Cámara en al menos tres oportunidades en el marco de una sesión: no convocó a las sesiones pedidas por la oposición, desobedeció el orden de temas que establece el reglamento y planteó que se necesitaba una mayoría agravada para un tema que requiere mayoría absoluta.
"Nosotros hicimos campaña diciendo que necesitamos cinco senadores para parar a Cristina, esto también es parar a Cristina", argumentaron en Juntos por el Cambio, más allá de que "querían" votar las leyes que estaban en el temario.
Pero tras el fracaso de una sesión en la que los temas estaban consensuados, la pregunta es ¿cómo sigue el Senado? ¿Seguirá trabado hasta diciembre, cuando se ponga en marcha la nueva conformación? ¿Qué pasará con la Ley Lucio? ¿Y con los pliegos de los jueces Federales?
En la oposición se entusiasman. Sobre todo Juntos por el Cambio, que ya se imagina Gobierno y con un Congreso mucho más favorable que durante el período 2015-2019, cuando gobernó en minoría. Ese entusiasmo los lleva a planificar los próximos pasos.
El primero de ellos, y que ayer anticipó Juntos por el Cambio durante el debate, es pedir una nueva sesión para el 13 de abril. ¿El objetivo? Tratar buena parte de los proyectos de ley que quedaron truncos tras la sesión fallida.
La prioridad, una vez más, serán los pliegos de los jueces Federales y la Ley Lucio. Pero también, buscarán que se vote al menos una parte de los temas incluidos por el oficialismo para la sesión de ayer, y que Juntos por el Cambio y Unidad Federal también acompañan.
¿Por ejemplo? La ley que reconoce la lengua de señas en todo el país, la que agiliza el trámite de Certificado Único de Discapacidad, que el personal de Salud no pague Ganancias por hacer horas extras además de aquel proyecto que amplía el plan nacional de cardiopatías congénitas.
"Hoy hay una mayoría circunstancial que indica que el resto de los temas se traten el 13 de abril", avisó Naidenoff al recinto.
La clave es la palabra "circunstancial". En Juntos por el Cambio se mostraron conformes por la performance que tuvieron como oposición. Más allá de que fueron tildados de "insensibles" por aplazar la sanción de leyes delicadas, el pacto con Unidad Federal no se rompió.
El objetivo era no moverse un ápice del temario que había propuesto para la sesión y lo mantuvieron hasta el final. Ningún senador cedió ante los pedidos de los familiares de víctimas de accidentes de tránsito para que se quedaran en el recinto y sancionaran la ley de alcohol cero que tanto pedían.
Sí hubo indicios que hacen pensar que hubo desconfianzas. El cordobés Luis Juez y Silvia Giacoppo, esta última muy cercana al gobernador de Jujuy Gerardo Morales, fueron de los últimos en abandonar el recinto. ¿Esperaron a que sus dos adversarios provinciales de UF hicieran lo propio? ¿Juez quería garantizarse que Alejandra Vigo abandonara la sesión, Giacoppo, que Guillermo Snopek (enemigo número uno de Morales) hiciera lo mismo?
Pero al margen de esas posibles desconfianzas, el objetivo de esta nueva "mayoría circunstancial" es mantener abierto el Senado. Y se preparan para coordinar la próxima sesión. "Ayer fue un avance", dijeron fuentes parlamentarias a El Cronista. Y agregaron que "hay que seguir trabajando en pos de ese trabajo conjunto".
La oposición buscará diferenciarse del oficialismo, en el hecho de que el Senado estuvo cuatro meses sin sesionar. Ayer Naidenoff les recordó a los familiares de víctimas de accidentes de tránsito que "este tema (por la ley de alcohol cero al volante) fue ignorado por el propio oficialismo, cuando el Presidente de la República solicitó el tratamiento en sesiones extraordinarias, no lo convocaron". El formoseño pronunció esas palabras mirando a los familiares, que seguían la discusión reglamentaria desde los palcos.
"La idea es revisar todo lo que tenga despacho y analizar cuáles tienen mayor prioridad", le dijeron a El Cronista. La mayoría circunstancial, dijeron desde JxC, es "tema por tema".
Es probable que, de acá al 10 de diciembre, ambos espacios busquen esos temas en común para llevarlos al recinto, mostrarse activos y, de paso, recordarle a Cristina Kirchner -que pegó el faltazo pese a que se encontraba en el Congreso- que "perdió el control del Senado"; como titularon en el comunicado que sacaron luego de la sesión fallida.