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El presidente Javier Milei ratificó el rumbo del programa económico. También aseguró que, si el Congreso insiste en aumentar el gasto, se recortará otra partida. El mandatario confió en que la tasa de interés, después de la elección, se va a desplomar.
Mientras tanto, el Gobierno busca prohibir la emisión monetaria para financiar el gasto y consolidar el equilibrio fiscal, mientras que responsabiliza al ruido político por el estancamiento de la economía.

Las aclaraciones se dieron tras una semana de volatilidad suscitada por la tasa de interés y la presión sobre el tipo de cambio.
Milei ratificó que el objetivo de su programa económico es mantener la macroeconomía ordenada "tras décadas de descalabro", y que ello se sustenta en las "tres anclas", monetaria, fiscal y cambiaria. "Dado que eliminamos el cepo y el dólar es libre y flota, las anclas vigentes siguen siendo la fiscal y la monetaria, ahora con el balance del Banco Central saneado".
Sus palabras fueron en un almuerzo del Consejo Interamericano del Comercio y la Producción (CICyP),
Tasa de interés
Además, agregó su administración saneó el pasivo del Banco Central, "algo que se suele criticar por la volatilidad que genera en la tasa de interés". Sin embargo, más adelante sobre la tasa agregó que responde al escenario electoral y la turbulencia política: "Frente a los kukas, no les debería sorprender que la tasa de interés esté en las nubes".
El presidente explicó que es habitual que haya cierta dolarización previa a un período electoral, pero agregó: "Igual la tasa se va a un montón porque hay volatilidad sobre el futuro".
Sin embargo, Milei se mostró confiado de que esto no es permanente, sino que "pasado el proceso electoral, la tasa de interés se va a desplomar".
Superávit
Respecto del resultado fiscal, el presidente ratificó que no lo negociará con ningún "degenerado fiscal" ni va a emitir "un solo peso para financiar proyectos proselitistas".
En esta misma línea, el vocero presidencial Manuel Adorni anunció que enviará al Congreso el proyecto de ley de Compromiso Nacional para la Estabilidad Fiscal y Monetaria, que prohíbe la emisión monetaria y garantiza el equilibrio fiscal.
La ley obligará a que el presupuesto sea equilibrado o superavitario, prohíbe gastos extrapresupuestarios y todo gasto tendrá que detallar el origen de los recursos, algo contemplado en la Ley 24.156 de Administración Financiera. Todas las normas que violen esto serán nulas. Además, incorporará figuras penales con este mismo objetivo.
El presidente además esbozó que tiene otros mecanismos para blindar el superávit: "Si el Congreso planea aumentar el gasto de manera negligente, vamos a vetar cada cosa que inventen. Si no logramos sostener los vetos, los vamos a judicializar. Y si no vamos a recortar el gasto en otro lado. Si ellos proponen aumentar el gasto en 2 puntos del PBI, redoblamos los esfuerzos para recortar 2,1 puntos en otra partida".
Actividad
El viceministro de Economía, José Luis Daza, reconoció ante la Bolsa de Comercio de Córdoba que la actividad económica entró en una meseta, pero analizó que "lo que estamos viendo está relacionado con la incertidumbre política y lo que pasa en el lado de los eventos políticos".
En el corto plazo estima que va a haber una desaceleración temporal de la actividad por la suba de las tasas, pero confía en las proyecciones del FMI que asegura que la economía argentina crecerá 5,5% este año.
Dólar
Si bien evitó profundizar en temas que pertenecen al Banco Central, Daza explicó que el presidente tiene un compromiso total con el esquema de flotación cambiaria entre bandas y que este esquema es temporal.
"La idea es que eventualmente (el dólar) va a flotar libremente, no necesitamos hacer saltos en algún momento, esto se va a ir abriendo de manera natural y vamos a transicionar a un tipo de cambio flotante y libre", detalló la mano derecha del ministro de Economía, Luis Caputo.
Por último, sumó un consejo a los empresarios y les recomendó que no asuman que van a salvarse con depreciaciones del tipo de cambio: "La dinámica que se va a generar en Argentina, en la medida que hacemos reformas estructurales, va a tender a llevar a un tipo de cambio que no va a ser particularmente débil".
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