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Los verdaderos 'sabuesos' de la AFIP se entrenan en una escuela de Boulogne, en provincia de Buenos Aires. Allí funciona el centro K9 de la Aduana donde los canes realizan ejercicios y reciben atención veterinaria, mientras que se capacitan con sus instructores.
El equipo K9, formado por binomios de entrenadores y perros de la Aduana-AFIP tiene hoy 122 canes operativos que trabajan en los pasos fronterizos y puertos. En las requisas, los animales -en su mayoría de raza, aunque hay también algún mestizo controlando en la terminal de Buquebus- encuentran drogas y billetes, dólares y pesos.
Los binomios operan en 27 aeropuertos internacionales, 10 puertos principales y más de 70 pasos fronterizos con 5 países. La escuela es la única de habla hispana reconocida por la OMA, la Organización Mundial de Aduanas. Es una de las cuatro que hay en toda América. Hay dos en Estados Unidos y una en Canadá.
En 2015 llegaron a ser 298 los canes en servicio pero el centro se desactivó durante la gestión de Juntos por el Cambio, según señalan Carlos Castagneto, titular de AFIP, y Guillermo Michel, de la Aduana, durante una entrega de premios a las duplas entrenador-can. En el gobierno de Mauricio Macri se cerró también otro centro de entrenamiento en Tandil.
Ahora los funcionarios preparan un decreto para asegurar el funcionamiento de la escuela como "política de Estado", sin importar de qué color sea el partido que gobierne.
En una ceremonia con demostración y medallas, las duplas fueron reconocidas por su labor: Lola detectó 3,7 kilos de fentanilo en un envío courier, mientras que Emma encontró billetes y monedas históricos. León fue premiado porque descubrió 70 kg de cocaína en el fondo de una cama de un motor home y Chola encontró otros 57 kg en un camión de bomberos.
Pasta base, marihuana y billetes -tanto dólares como pesos- son algunos de los bienes que detectaron los binomios a lo largo del año pasado.
La carrera de los canes tiene un promedio de 8 años y después ‘se retiran'. Cuando lo hacen, en la gran mayoría de los casos siguen en la familia de sus entrenadores. La relación entre los animales y sus humanos se construye desde cachorros y la comunicación entre ellos es clave para identificar las señales de los animales ante los hallazgos.
Los perros entran en servicio a partir del año y medio, cuando el carácter ya madura. "Antes son adolescentes", explican los veterinarios del predio. En los operativos los animales tienen un máximo de 6 horas de trabajo y descansos según las tareas, que pueden ser cada 20 minutos.
Controles de salud y sanitarios
En el centro hay 6 médicos veterinarios, cada uno con una especialidad -cirugía, anestesia, laboratorio, entre otras-. Son los encargados de los controles de los cachorros, quienes determinan si los perros son aptos, pero también realizan operaciones en caso de que sea necesario.
Su tarea principal es la "sanidad preventiva" y visitan a los perros de la Aduana en todo el país, teniendo en cuenta las enfermedades de cada región. Son animales que además están en contacto con personas en puertos y aeropuertos y pasos, entonces tienen que estar libres de enfermedades zoonóticas.
Además de la escuela Boulogne, hay centros de entrenamiento en Bahía Blanca y en Salta. Hoy hay 62 canes en proceso de entrenamiento. De éstos, 42 están en el centro bonaerense.
Las razas por región
Por las diferencias de clima en el país, se apostó a diferentes razas de perros. Así, cuenta con labradores, golden retrievers, malinois, ovejeros alemanes y flat coated retrievers. También están haciendo pruebas con border collies en la región norte, "perros más posesivos pero que están mostrando buenos resultados", asegura Michel.
"No tenemos nada en contra de los perros callejeros", explica la instructora Débora Di Biase. Pero señala que se apunta a la reproducción y "es necesario conocer la genética de los canes".
En el organismo tienen un criadero propio, pero aseguran que se busca que tengan una sola camada en su vida. Las perras son desafectadas del servicio mientras dura la gestación y en los 60 días posteriores, cuando los cachorros están con la madre durante el período de imprinting, cuando aprenden las características de ser perros.
Los canes pueden ser provistos por otros criadores, pero tienen que demostrar que los animales no tienen condiciones preexistentes, como la displasia. "Los perros que tienen patologías no entran al servicio", reconocen los veterinarios, que aseguran que las tareas en sí no generan problemas de salud en los canes
Cómo entrenar a un can
Un mito que rodea al entrenamiento es que los perros son drogados y por eso detectan las sustancias. En realidad, se trabaja con algodones embebidos de determinadas sustancias que se colocan cerca de los juguetes.
Después de varias interacciones, el perro asocia que donde está el olor, está el juguete, la recompensa que, por lo general, es una pelota. Ese uno de los estímulos con los que se trabaja: el juego. El otro refuerzo es la comida. El entrenamiento tiene varias etapas. "La relación con el olor se aprende rápido, pero después se apunta a la obediencia", explican los instructores.
Amores perros
Los perros son parte de la familia de sus guías. Después de entre 8 y 10 años de servicio, "en el 99% de los casos los perros se quedan con sus entrenadores cuando se retiran". Una de las instructoras cuenta que ya tiene dos canes retiradas en su casa.
Sebastián, instructor de la región Norte, reconoce que es difícil separarse de los perros que se entrenan y se entregan a otro guía. También dice que hay fechas críticas, como las fiestas, en las que los entrenadores pasan la noche buena o año nuevo en las escuelas para estar con los canes y evitar que se sobresalten o angustien con la pirotecnia. "Se juega desde temprano para relajarlos y después se les pone música para evitar el impacto sonoro. Toda la familia contribuye con parlantitos".
Los más chicos de la familia extrañan a los canes cuando salen a trabajar. "Andá vos y dejalo al perro", escuchó más de una vez un entrenador. En otra oportunidad, cuando le dijo a su hija de cinco años que no le iba a comprar una muñeca nueva por que la había roto, la chica lo dejó sin palabras: "pero si el que trabaja es el perro", retrucó.