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Domingo Cavallo volvió a plantear la necesidad de que el Gobierno acumule reservas y detalló un plan para que la administración de Javier Milei pueda comprar dólares sin generar crisis cambiarias ni presiones inflacionarias.
La propuesta del exministro de Economía implica eliminar completamente el cepo al mismo tiempo que el Banco Central (BCRA) compra dólares, implementando un sistema bimonetario similar al que funciona en Uruguay, Paraguay y Perú.
“Yo soy uno de los que sostiene que conviene comenzar pronto a acumular reservas. Debería disponerse simultáneamente la eliminación completa del cepo y la compra de reservas”, plantea Cavallo en el último informe publicado en su sitio web.
La propuesta de Cavallo busca resolver el principal dilema que enfrenta el equipo económico: cómo acumular dólares sin que esa compra empuje el tipo de cambio al alza ni genere emisión que traslade a precios.
El ex ministro considera que la solución no pasa por evitar la acumulación sino por cambiar las reglas del juego monetario.
Sistema bimonetario: la clave del plan de Cavallo
El componente central del plan de Cavallo implica permitir el uso del dólar “para todas las funciones que cumple el peso, especialmente para la intermediación financiera”. Esto significaría implementar “un sistema bimonetario como el que funciona en Perú, en Uruguay y en Paraguay”, explica el economista.
Bajo este esquema, “el tipo de cambio buscaría su nivel de equilibrio y las tasas de interés, tanto en pesos como en dólares, bajarían como consecuencia de una fuerte reducción del riesgo país”, proyecta Cavallo.
El ex ministro argumenta que esta configuración eliminaría la necesidad de mantener altas tasas reales para sostener el tipo de cambio en niveles artificiales.
Cavallo alinea su visión con la del staff del FMI, quien “insiste en que el gobierno debería anunciar un programa de compra de reservas y llevarlo a cabo rigurosamente para acentuar la reducción del riesgo país y remover expectativas de futuros saltos devaluatorios”.
El economista cuestiona directamente la postura oficial sobre las reservas. “Las declaraciones de los miembros del equipo económico son al menos confusas sino contradictorias”, afirma.
Además, Cavallo menciona que el Gobierno evita acumular reservas por temor a que empuje el tipo de cambio al alza y a que la emisión necesaria para pagarlas traslade a precios.
Por qué la acumulación de reservas es urgente, según Cavallo
Cavallo advierte que la actual configuración de precios relativos genera daños concretos en la economía. El exministro señala que “las altas tasas reales de interés y la sobrevaluación del peso neutralizan los beneficios de la desregulación y la apertura económica”.
El economista explica que mantener el peso sobrevaluado requiere restringir el movimiento de capitales o imponer altas tasas reales de interés. “O ambas cosas a la vez, como está ocurriendo ahora”, señala.
“Ya hay indicios claros de que las altas tasas reales de interés del tercer trimestre causaron un daño importante a deudores bancarios y a entidades financieras”, advierte Cavallo.
El especialista también destaca un efecto menos conocido de las altas tasas: generan “inercia inflacionaria” porque obligan a los productores que financian su capital de trabajo con crédito bancario a ofrecer sus productos a precios que suban a un ritmo cercano a la tasa de interés para evitar quebrantos.
“El tipo de cambio buscaría su nivel de equilibrio y las tasas de interés, tanto en pesos como en dólares, bajarían como consecuencia de una fuerte reducción del riesgo país”
El economista considera que seguir este curso de acción, con apoyo del FMI y del Tesoro estadounidense, sería “un reaseguro de que antes de la elección de 2027 se habrá consolidado una reducción significativa de la inflación sin que haya otra crisis como la que se desató entre julio y agosto pasados”.
Cavallo propone además que las decisiones sobre convertibilidad del peso y curso legal para el dólar se sancionen simultáneamente con el Presupuesto 2026. De esta forma quedaría definido “un plan de estabilización con chances de éxito pleno antes de la elección de 2027”, argumenta.
El exministro advierte que las reformas estructurales que se discutirán en el Congreso —laboral e impositiva— son importantes pero “no influirán significativamente sobre el nivel de actividad económica y la tasa de inflación en el corto plazo”. Para monitorear la reactivación económica, considera “más relevante entender de qué manera el gobierno piensa eliminar o atenuar la represión financiera y cambiaria”.
Cavallo espera que las discusiones con el FMI para la revisión del programa “ayuden a clarificar el curso futuro de la política monetaria, cambiaria y financiera”. El economista insiste en que definir estas reglas del juego es “crucial para la consolidación de la estabilidad macroeconómica y la reactivación de la economía”.