

Empresarios de distintos sectores afirmaron ayer que el Banco Central (BCRA) recortó a la mitad la disponibilidad de dólares diarios para importaciones. El recorte afectó a todos: a los grandes demandantes de divisas que tienen cupos mensuales acordados con el Gobierno (fabricantes de autos y motos y ensambladores de Tierra del Fuego), importadores pequeños y medianos y empresas de turismo. Llegó dos días después de las elecciones y con las reservas apenas arriba de los u$s 27.000 millones.
Desde temprano, el BCRA indicó a los bancos de manera extraoficial que debían informar a la autoridad monetaria cualquier pedido de dólares para pagar importaciones superior a los u$s 75.000. Hasta ayer, ese límite era u$s 150.000 y las operaciones superiores a ese monto debían contar con la autorización de la entidad que preside Alejandro Vanoli.
Según una fuente del BCRA, el nuevo requerimiento de información procura detectar operaciones irregulares y no implica nuevas restricciones al comercio exterior. En otras palabras, dijo que las operaciones de entre 75.000 y 150.000, debían informarse y luego se cursaban normalmente. Pero distintos importadores contaron que el cupo para adquirir divisas se les recortó a la mitad. "Si pedís u$s 100.000, te dan u$s 75.000. Así de simple", resumió un integrante de la Cámara de Importadores (CIRA).
CIRA emitió un duro comunicado que marca el humor de los empresarios tras el cambio del mapa político de las elecciones del domingo. "Este tipo de medidas de neto corte coyuntural pone a las empresas en situaciones cercanas al default comercial, que implican penalidades adicionales, costos de mora por incumplimiento de compromisos asumidos en tiempo y forma y hasta interrupciones posibles de suministro de materias primas, insumos y bienes críticos para la producción y la población", expresó la cámara que preside Diego Pérez Santisteban.
CIRA representa, principalmente, a los importadores medianos y pequeños. Los grandes empresarios demandantes de divisas tienen sus acuerdos particulares con el Banco Central. Según una fuente del sector automotriz, estos cupos también se redujeron. "Recortaron 50%, la medida fue pareja para todos", afirmó. En rigor, las automotrices habían sufrido un recorte del 33% luego de las elecciones primarias del 9 de agosto, que nunca se regularizó. La poda se extendió a fabricantes de motos y ensambladores de Tierra del Fuego.
A fines de junio, el Ejecutivo había ampliado el cupo mensual para estos tres sectores en hasta 30%. Las automotrices pasaron a recibir u$s 200 millones (más u$s 30 millones adicionales para las terminales con proyectos de nuevos modelos), los fabricantes de motos, u$s 30 millones y los empresarios fueguinos, u$s 300 millones.
El Gobierno había prometido a las automotrices regularizar ese cupo hacia fines de septiembre y, en paralelo, discutir la disponibilidad de dólares para el último trimestre del año. Pero los funcionarios nunca convocaron a los representantes de las terminales, que piden más divisas para mantener la producción.
Las líneas aéreas y empresas de turismo también sufrieron un recorte del 50%, según fuentes del sector. Esto, alertaron en el mercado, podría encarecer los pasajes de avión de las empresas extranjeras. Miguel Ponce, director del Centro de Estudios para el Comercio Exterior Siglo XXI, consideró que "esto es un default comercial, porque las empresas no saben cuándo van a poder pagarles a sus proveedores".
Cambio de clima
El comunicado de CIRA contra las restricciones a las importaciones abrió un nuevo período de demandas a un gobierno debilitado tras las elecciones. CIRA criticó también el sistema de Declaraciones Juradas de Anticipo de Importación (DJAI). "En los últimos meses vienen fluyendo de una manera errática", aseguró. Y afirmó que para conseguir ese permiso hay que tener "suerte", porque "no existe criterio escrito y reglamentado para definir cuándo es aprobada y cuándo no".
El Gobierno relativizó los reclamos. El Banco Central afirmó que los pedidos de información no bloquean las compras de divisas, sino que buscan obtener un mayor control. El Ministerio de Economía indicó que el sistema de DJAI, que controla el secretario de Comercio, Augusto Costa, funciona con normalidad.
Los importadores estiman que las deudas de las empresas con las casas matrices y bancos del exterior por las restricciones al acceso a divisas alcanzan los u$s 9000 millones. Se calcula que existe una cifra similar de utilidades sin girar al exterior.














