En esta noticia

El ministro de Economía, Sergio Massa, salió fuerte a dar una señal de cercanía con el campo, un sector clave para el ingreso de dólares al país, y ayer se sumó a la parte final de un almuerzo que el secretario de Agricultura, Juan José Bahilo, mantuvo con Coninagro, una de las entidades que forma parte de la Mesa de Enlace.

Allí, si bien no hizo anuncios específicos en cuanto a un nuevo dólar soja, sí manifestó su postura en cuanto a la necesidad de llegar a un acuerdo.

Hasta el hoy los encuentros entre los técnicos de Agricultura y la Mesa de Enlace no tuvieron mayores resultados, aunque según confiaron las fuentes consultadas en breve se daría algún anuncio, que tendría que ver con la fijación de un valor del dólar que recibe el campo, y que sería similar al actual "dólar tarjeta", que hoy ronda los $ 235.

Esta valor está bien visto por el campo, y al mismo tiempo tiene la simpleza financiera que reclaman los productores, una característica que no tiene el actual "dólar soja".

El otro punto que está en discusión está relacionado con el porcentaje del dinero del total liquidado que reciben. De acuerdo con el instrumento que lanzó el Banco Central durante la gestión de Silvina Batakis al frente de Economía, aquellos que liquiden la soja antes del 31 de agosto podrían acceder con el 30% del pago recibido por su mercadería en dólares al valor oficial.

Con el 70% restante, en cambio, se debería abrir un plazo fijo atado al avance del tipo de cambio.

Esta ecuación también está en revisión, y seguramente se dispondrán otros porcentajes. Además, se debería ampliar al plazo, ya que la actual normativa habla del 31 de agosto.

Distintas visiones

Estas discusiones entre el Gobierno y el campo también deben superar internas que hay de un lado y del otro. En el oficialismo persisten las diferencias sobre si corresponde o no aplicar un dólar diferencial -algo con lo que no está de acuerdo Miguel Pesce, el presidente del Banco Central-.

Y dentro de la Mesa de Enlace, nadie quiere que un acuerdo sea considerado como poco conveniente, y les genere problemas políticos internos.

Quien hoy precisa mayor celeridad en la liquidación de exportaciones es el Gobierno, ya que tiene cada vez más cerca la revisión de metas con el Fondo Monetario Internacional (FMI), y precisa un inmediato shock de ingreso de dólares para no alejarse de lo pautado.

"No vamos a desconocer que necesitamos de la liquidación del campo", reconoció Bahillo el martes pasado, durante otro encuentro con Coninagro.

En el Gobierno reconocen que el actual mecanismo que se habilitó para mejorar la liquidación de exportaciones del campo no fue suficiente, ni tuvo los resultados esperados

"No fue efectiva ni asertiva", sostuvo al hablar sobre el actual dólar soja, y afirmó que la liquidación fue muy poca.

"Ahora las condiciones macro se estabilizaron y hay una previsibilidad que en julio no había, pero no estamos teniendo liquidación. Tenemos que reformular esta herramienta y crear condiciones atractivas para que ingresen divisas", resaltó.

Por otra parte Massa también encabezó una reunión -junto a Pesce y el secretario de Comercio Interior, Matías Tombolini- con representantes del sector alimenticio, y allí también la necesidad de dólares fue el eje.

Los empresarios insistieron con la habilitación de un mayor caudal de importaciones, sobre todo para poder ingresar al país insumos clave para la elaboración de diferentes productos.

La postura oficial en este sentido es clara, y idea es no ir más allá de la apertura hacia aquellos productos que sean esenciales para el normal funcionamiento de las industrias, de modo de no generar frenos en la producción.

Además, se avanzó sobre lo que será el nuevo Programa de Precios Cuidados, que tendrá como objetivo marcar una referencia para el mercado. Por el lado de la industria participaron Agustín Llanos (Molinos), Carlos Agote (Mastellone), Gabriela Bardin (Procter & Gamble), Esteban AgostCarreño (Coca Cola), Gonzalo Fagioli (Quilmes), Adrián Kaufmann (Arcor), Laura Barnator (Unilever).