

Con la mirada puesta en el cuidado del medio ambiente y en reflejar la más fiel interpretación de los terruños mendocinos, Terrazas de los Andes ha tenido un 2023 que marcará un hito en su historia.
La bodega es pionera en la viticultura de altura desde principios de la década de 1990. Este año, presentó su nueva imagen de marca, con una innovadora etiqueta envolvente que permite realizar un viaje de ascenso visual y así rendir homenaje a las escarpadas paredes rocosas y al entorno extremo de la Cordillera de los Andes.
La nueva identidad de marca comenzó a verse en el mercado a partir de marzo cuando salió a la venta la cosecha 2021 de la línea Terrazas de los Andes Reserva en sus distintos varietales. En mayo, la línea hasta hoy conocida como Apelación de Origen, llegó al mercado con nueva imagen y nombre, Terrazas de los Andes Origen.
Recientemente, la cosecha 2023 de Malbec Rosé desembarcó con su nueva etiqueta en los distintos puntos de venta del país. Para el 2024, está previsto que la línea Terrazas de los Andes Grand y la colección Parcel hagan su cambio de imagen cuando los vinos de la añada 2021 se empiecen a comercializar.
Además, Terrazas de los Andes, dio a conocer su programa de sustentabilidad "Guardianes de la vida en la montaña", que tiene como objetivo develar y proteger la magia de la cima del mundo, adoptando la viticultura regenerativa y orgánica, conservando el agua preciada de los glaciares y apoyando a la comunidad andina local y a los propios empleados de la bodega.
En sintonía con el programa de sustentabilidad, Terrazas de los Andes recibió la certificación ROC, un hito importante para la bodega ya que es una de las primeras del grupo LVMH que logra este nivel de reconocimiento. Dicha certificación es desarrollada por la organización sin fines de lucro Regenerative Organic Alliance, expertos en salud del suelo y agricultura regenerativa.
La certificación se basa en tres pilares: la salud del suelo y el trabajo de la tierra, el bienestar animal y la equidad de los trabajadores, que se evalúan frente a algunos de los estándares más estrictos de la industria. Para el año 2026 se espera que Terrazas de los Andes tenga el 100% de sus viñedos certificados. Tan sólo 10 bodegas en el mundo tienen esta certificación que distingue las prácticas agrícolas holísticas en una certificación integral que favorecen la generación de materia orgánica del suelo, preservan la biodiversidad y promueven estabilidad económica y equidad para los trabajadores.
La agricultura de precisión, la cosecha en el punto de madurez justa de la uva y la agricultura orgánico -regenerativa es lo que le permite a Terrazas de los Andes una expresión singular de sus terruños, donde cada botella evidencia la fruta, las especias y la frescura que entregan sus viñedos de altura. Hace unos años, como parte de esta búsqueda, decidió realizar algunos cambios en su forma de trabajo para proteger la magia de la cima del mundo, actuando como Guardianes de la Montaña a través de significativas iniciativas para proteger su ecosistema.
En la actualidad, Terrazas de los Andes cultiva un mosaico de más de 200 parcelas de altura que ofrecen fruta 100% pura, irrigadas de manera precisa y sostenible con agua de glaciar. La visión del equipo enológico llevó a Terrazas de los Andes a elaborar vinos en los lugares más recónditos de los Andes en Mendoza, donde el cielo y la tierra se encuentran. Posee viñedos de clima frío en las apelaciones más conocidas de la provincia y conquistó la vitivinicultura extrema.










