Inteligencia Artificial: desafíos en el aula

La inteligencia Artificial (IA) es una disciplina en el campo de las ciencias de la computación, capaz de proveer modelos, programas y técnicas que por sus características se asocian a la inteligencia de la naturaleza humana; el razonamiento, la resolución de problemas, la predicción, y el aprendizaje de las máquinas en función de la experiencia, entre otros. Estas capacidades ya se utilizan en diferentes dominios del conocimiento y son aplicados en múltiples campos Medicina, Economía, Ciencias Ambientales, Arquitectura y Urbanismo, Análisis, proyecciones de Mercado, Comportamiento del Consumidor.

La Inteligencia Artificial (IA) en Educación genera sin duda, un cambio disruptivo, en particular uno de sus atributos más innovadores es la diferenciación de la enseñanza a partir de las características individuales de cada alumno. Esto es posible mediante el análisis de un conjunto de datos relacionados con la historia educativa, perfiles psicosociales, estilos de aprendizaje, -el complemento de una tecnología de avanzada-, y el uso de modelos cognitivos capaces de predecir como aprenden cada uno de los alumnos.

Ahora bien en este escenario de automatización, cabe preguntarse, ¿cuál será el rol del profesor? ¿Se desdibujara su figura? ¿Habrá un costo emocional?

Algunas visiones apocalípticas señalan que estaremos en presencia del fin del trabajo, sin embargono hay ningún robot que pueda reemplazarse por un vínculo humano y no hay nada menos humano que a una persona que se parezca a un robot.

El rol de profesor siempre estará presente para motivar, desarrollar el pensamiento crítico, incentivar la investigación profunda, desplegar las habilidades socioemocionales de cada alumno, el trabajo en equipo, el liderazgo, el intercambio social en el aula, y por sobre todas las cosas el ejemplo a seguir.

Para el estudiante estos programas expertos también ofrecen soluciones: reconocen la diversidad en los ritmos de aprendizaje, ofrecen retroalimentación en tiempo real en el proceso de aprendizaje, y favorecen las habilidades digitales.

Frente a este estado del arte de las innovaciones surgen los siguientes interrogantes ¿Cuáles serán las estrategias educativas públicas y privadas a fin de aplicar estándares para la homologación de estos avances?

La Inteligencia Artificial (IA) es un asunto de estado, el desafío estará dado por lograr la complementariedad de estos sistemas inteligentes con los convencionales, de manera que la tecnología se transforme en aliada de la formación docente y las nuevas regulaciones garanticen también el resguardo de la información.

Es de esperar entonces, que los hacedores de políticas públicas tomen conciencia de estos avances y vislumbren la importancia de estar a la vanguardia.