

Los exministros colombianos Ricardo Bonilla (Hacienda) y Luis Fernando Velasco (Interior) fueron enviados este jueves a detención preventiva por una magistrada del Tribunal Superior de Bogotá, por su participación en el escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).
Así, Bonilla y Velasco se convierten en los dos exfuncionarios de más alto rango del presidente Gustavo Petro que van a la cárcel por este escándalo, tras ser acusados de liderar una “organización criminal” que, entre 2023 y 2024, supuestamente destinó más de 612.000 millones de pesos para pagar a congresistas a cambio de apoyo legislativo al Gobierno.
La decisión judicial impuso medida de aseguramiento contra los dos exministros mientras avanza su proceso penal, en el que enfrentan cargos por concierto para delinquir, cohecho por dar u ofrecer e interés indebido en la celebración de contratos, delitos que la Fiscalía les imputó a comienzos de este mes.
Tribunal avaló prisión preventiva por riesgos al proceso
En su decisión, la magistrada Aura Alexandra Rosero señaló que el hecho de que los exministros ya no ocupen cargos públicos no elimina los “riesgos del proceso”. Rosero explicó que las conductas investigadas no se limitaban al ejercicio de sus funciones, sino que se apoyaban en redes políticas y administrativas ya consolidadas, que operaban a través de terceros.

El Tribunal sostuvo además que la medida carcelaria es “idónea, necesaria y proporcional” y que el peligro no depende del riesgo de fuga de los imputados, sino en la necesidad de evitar que “rearticulen o continúen prácticas criminales anteriores”.
Quiénes son los exministros salpicados por el caso UNGRD
Bonilla fue el segundo ministro de Hacienda del gobierno de Gustavo Petro, cargo que ocupó entre mayo de 2023 y diciembre de 2024, cuando presentó su renuncia tras quedar vinculado a las irregularidades en la UNGRD.
Velasco, por su parte, cuenta con una extensa trayectoria política: fue presidente del Senado, dirigió de manera breve la UNGRD en abril de 2023 y posteriormente asumió el Ministerio del Interior, que lideró entre mayo de 2023 y junio de 2024.
Según la investigación, al exministro Bonilla se le relaciona con la presunta adjudicación de contratos por al menos 92.000 millones de pesos (unos USD 23 millones) en beneficio de seis congresistas, a cambio de su respaldo en el Congreso a la ampliación del cupo de endeudamiento del Gobierno.
La Fiscalía imputó cargos a los exfuncionarios a comienzos de este mes; sin embargo, ambos no aceptaron los cargos y rechazaron los señalamientos en su contra.
Cómo escaló el escándalo de corrupción en la UNGRD
El escándalo de la UNGRD, entidad encargada de prevenir y atender emergencias en el país, estalló en febrero del año pasado tras denuncias periodísticas y ha sido considerado el mayor caso de corrupción del gobierno de Gustavo Petro.
Desde entonces, la investigación ha avanzado hasta involucrar a altos funcionarios y a los expresidentes del Senado Iván Name y de la Cámara de Representantes Andrés Calle, quienes fueron detenidos el pasado 7 de mayo.
Ambos congresistas son investigados por los delitos de cohecho impropio y peculado por apropiación a favor de terceros, en una decisión adoptada por la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia.
En mayo del año pasado, el exsubdirector de la UNGRD Sneyder Pinilla, condenado por este caso a más de cinco años de prisión, reveló que recursos de la entidad fueron utilizados en 2023 para pagar millonarias coimas a Name y Calle.
Petro defiende al exministro Bonilla de las acusaciones
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, defendió el jueves a su exministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, y aseguró que, según su “conciencia”, es inocente.
“Ricardo Bonilla es doctor en Economía y profesor de profesión. Lo conozco desde hace años y sé que es inocente en mi conciencia”, escribió el mandatario en X, después de que el Tribunal Superior de Bogotá ordenara la reclusión del exministro.

En el mismo mensaje, Petro afirmó que Bonilla ha sido “extorsionado” y convertido en un “chivo expiatorio”, y atribuyó su situación judicial a lo que calificó como una “ingenuidad” por haberse apoyado en sectores opositores del uribismo durante su paso por el Ministerio de Hacienda.
El jefe de Estado defendió, además, que fue su Gobierno el que frenó cualquier intento de tráfico de influencias de congresistas, al señalar que expulsó de la UNGRD al entonces director, Olmedo López, tras detectar hechos de corrupción.
Con información de EFE-.









