

Una senadora republicana quedó en el centro de la polémica tras minimizar los recortes propuestos en Medicaid, el programa de salud pública que sostiene a millones de jubilados y enfermos en Estados Unidos.
Su frase "todos vamos a morir" desató fuertes críticas y reavivó el debate sobre el impacto social de la transformación del sistema de salud estadounidense.
Joni Ernst, representante de Iowa, defendió su postura mientras en el Congreso avanza un proyecto de reforma fiscal, impulsado por el presidente Donald Trump, que busca recortar más de un billón de dólares en programas sociales como Medicaid.

¿Qué es Medicaid y por qué es clave para jubilados y enfermos?
Medicaid es un programa público financiado por el gobierno federal y los estados. Brinda cobertura médica a personas con bajos ingresos, especialmente adultos mayores, discapacitados y pacientes crónicos.
A diferencia de Medicare, Medicaid cubre servicios esenciales como:
- Cuidados de largo plazo en hogares geriátricos.
- Atención médica domiciliaria especializada.
- Tratamientos prolongados o costosos para enfermedades crónicas.
La frase de Joni Ernst que desató la controversia
Durante un encuentro con votantes, un asistente advirtió que los recortes a Medicaid podrían poner vidas en riesgo. La senadora respondió: "Bueno, todos vamos a morir". La frase desató una amplia controversia a nivel estatal y federal.
Al día siguiente, Ernst publicó un video en Instagram desde un cementerio. Allí dijo: "Asumí que todos entendían que, sí, todos vamos a fallecer". Su disculpa tuvo un tono irónico: "Me alegra no haber tenido que mencionar al Hada de los Dientes". Finalizó con un mensaje religioso invitando a abrazar a Jesucristo.

¿Cómo afectaría la reforma propuesta a la salud pública?
El proyecto republicano que Donald Trump llama su "Gran y Hermoso Proyecto de Ley", aprobado en la Cámara Baja, busca recortar gastos sociales en más de un billón de dólares, afectando a millones.
Según estimativos de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO):
- Se eliminaría la cobertura de Medicaid para 8,7 millones de personas.
- 7,6 millones quedarían sin seguro médico.
- Se implementarían nuevos requisitos laborales para acceder a beneficios.
Aunque la Casa Blanca avala la reforma argumentando que busca combatir el fraude y mejorar la eficiencia, organizaciones advierten sobre el impacto severo para adultos mayores y pacientes de alto riesgo.











