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Limpiar las hornallas del hogar puede resultar tedioso, especialmente cuando acumulan óxido y grasa. Sin embargo, existe una alternativa casera, económica y efectiva que no requiere vinagre ni lavandina: se trata de una pasta de crema de tártaro con agua.
El ácido tartárico presente en la crema de tártaro ayuda a disolver el óxido, mientras que la consistencia en pasta facilita la eliminación de la suciedad adherida.
Al aplicarla correctamente, logra aflojar la grasa y los depósitos metálicos sin dañar las hornallas, ofreciendo una solución práctica y segura para la limpieza del hogar.
Cómo preparar y aplicar la pasta de crema de tártaro
Colocar dos cucharadas de crema de tártaro en un recipiente pequeño.
Agregar unas gotas de agua hasta formar una pasta espesa y homogénea.
Aplicar la mezcla directamente sobre las zonas oxidadas o con grasa de las hornallas.
Dejar actuar entre 5 y 10 minutos, permitiendo que el ácido tartárico afloje los depósitos.
Frotar con un cepillo o esponja suave para remover el óxido y la grasa.
Enjuagar con agua caliente y secar con un paño limpio.
Ventajas frente a otros productos caseros
No contiene vinagre ni lavandina, evitando olores fuertes o productos corrosivos.
Es económica y ecológica, usando ingredientes fáciles de conseguir.
Segura para las hornallas, ya que no daña el metal ni genera residuos peligrosos.
Resultados rápidos, logrando eliminar óxido y grasa en apenas 10 minutos.
Con esta mezcla casera de crema de tártaro y agua, limpiar las hornallas se vuelve una tarea sencilla, rápida y segura, sin necesidad de recurrir a productos químicos agresivos.
¿Cómo evitar que se oxiden las hornallas?
Es importante mantenerlas siempre limpias y secas después de cada uso, retirando restos de comida, grasa y líquidos que puedan quedar sobre la superficie. También conviene aplicar una capa ligera de aceite vegetal sobre el metal de forma periódica, ya que actúa como barrera protectora contra la humedad.
Evitar el contacto prolongado con agua y almacenar las hornallas en lugares ventilados contribuye a prevenir la formación de óxido y mantenerlas en buen estado por más tiempo.
