

Estados Unidos prepara la apertura de un nuevo centro de detención para inmigrantes ilegales en Florida, en el marco de un operativo inédito impulsado por el gobierno estatal y federal.
La instalación estará ubicada en una zona remota de los Everglades y será parte de la estrategia para aumentar la capacidad de detención ante el endurecimiento de las políticas migratorias.
La medida, liderada por el gobernador Ron DeSantis, apunta a aliviar la saturación de cárceles locales y a reforzar el control fronterizo. El proyecto ya genera controversia por sus posibles efectos ambientales y humanitarios, así como por el alto costo de operación que implica.

¿Dónde está la nueva cárcel para inmigrantes ilegales en Estados Unidos?
La nueva cárcel estará ubicada en una pista aérea aislada de los Everglades, al oeste de Miami, en un área conocida como "Alligator Alcatraz" por su difícil acceso y la presencia de fauna peligrosa.
El estado también evalúa construir otro centro similar en Camp Blanding, una base de la Guardia Nacionalen el noreste de Florida, cerca de Jacksonville.
Estos centros utilizarán carpas reforzadas y tráileres para alojar hasta 5.000 personas, en condiciones temporales, aunque el costo de operación anual podría superar los USD 450 millones, según fuentes oficiales.

¿Por qué es polémica la nueva cárcel y qué riesgos existen?
La ubicación remota y el entorno hostil han sido señalados por autoridades como ventajas de seguridad, pero críticos advierten sobre los riesgos para la salud, el ambiente y los derechos humanos.
Organizaciones defensoras de inmigrantes y del medio ambiente denuncian que la instalación podría exponer a los detenidos a condiciones inhumanas y dificultar su evacuación ante emergencias como huracanes.
El gobierno de Florida asegura que existen planes de evacuación y que las operaciones estarán coordinadas con la agencia federal de manejo de emergencias. Sin embargo, la medida sigue generando fuerte rechazo entre defensores de los derechos civiles y ambientalistas.











