Nike, el mayor fabricante mundial de ropa y calzado deportivo, acordó hoy la compra de Umbro, en una operación que valúa a la firma británica en 285 millones de libras esterlinas (580 millones de dólares).

“Sentíamos que la combinación de Nike y Umbro nos da un claro liderazgo en fútbol, mundialmente, y que sería una de esas oportunidades de fusión caída del cielo , señaló a Reuters Eunan McLaughlin, vicepresidente de Nike para Europa, Oriente Medio y Africa.

Umbro provee a los equipos nacionales de fútbol de Irlanda, Suecia y Noruega, a seis equipos de primera división y a más de 100 otros equipos profesionales del mundo, así como a Inglaterra.

Además, McLaughlin dijo que Nike deseaba continuar con el crecimiento de su marca. “Deseamos invertir y hacer crecer la marca Umbro. Estamos en esto para el largo plazo. No está la intención de cambiar el equipo de fútbol de Inglaterra, ya que seguirá siendo un negocio de marca Umbro. Pero por supuesto que queremos la posibilidad de transferir algunos activos dentro de las dos marcas , dijo McLaughlin.

Nike precisó que los accionistas recibirán 193,06 peniques por acción en Umbro, espónsor de la selección inglesa de fútbol, lo que representa una prima de aproximadamente 61% sobre el precio de cierre del valor el 17 de octubre, de 120 peniques.

“Hemos puesto una oferta muy tentadora sobre la mesa, la hemos revisado con el directorio de Umbro y ellos la están recomendando a sus accionistas , dijo McLaughlin.

Las acciones de Umbro, que advirtió el mes pasado que sus ganancias del 2008 incumplirían los pronósticos debido a las bajas ventas en el 2007 de sus réplicas de la camiseta de Inglaterra, subían 14,4%.

“El precio es bueno para el negocio, ciertamente (la acción de Umbro) no tendría este valor si no hubiera una oferta , aseguró Andrew Wade, un analista de Seymour Pierce.

Umbro estuvo trabajando sobre una estrategia que se focaliza más en vestimenta para fútbol que en las remeras de la selección inglesa. Asimismo, considera que su negocio internacional, su desempeño financiero tendrá menos desniveles al pasar de un año con un gran torneo de fútbol (como un Mundial o la Eurocopa) a otro sin torneos de ese tipo.