

El debate sobre el cuidado de las finanzas personales pone en el centro de la discusión a una de las herramientas más solicitadas por los ciudadanos que buscan ahorrar y amortizar sus gastos: las tarjetas de crédito. La duda existencial que se forja en torno a esta temática se resume en una sola pregunta: ¿cuántas tarjetas de crédito debe tener un ciudadano para cuidar sus finanzas y evitar que las deudas se descontrolen?
La respuesta no es tan simple como contar plásticos, y los especialistas advierten que el número ideal es muy distinto al que muchos imaginan. Si bien existen quienes recomiendan tener solo una tarjeta, diversos expertos mantienen la postura de que el contexto ideal implica la gestión de varias.
En este contexto, se advierte que la clave no está solo en cuántas tarjetas de crédito se posee, sino en cómo se utilizan y cómo los bancos interpretan ese comportamiento. Y a pesar de que existan cuentahabientes que manejan cinco o más sin problemas, otros terminan dañando su historial crediticio con apenas una o dos mal administradas. La verdadera razón detrás de esto sorprende incluso a usuarios con años de experiencia.
Uso de tarjetas de crédito y finanzas personales: ¿qué es lo que miran los bancos?
Una de las claves con las que se rigen los expertos está relacionada con el uso que se le da a los plásticos. Algunos especialistas sostienen que no tiene ninguna utilidad contar con sólo 3 tarjetas de crédito si todas están al tope.

Esto se debe a que las instituciones de crédito fiscalizan el uso que los clientes le dan a las herramientas y servicios que ofrece. Utilizar el 100% de la línea disponible envía una señal negativa a los bancos ya que da a entender que se utiliza el crédito para cubrir los gastos básicos. Esto afecta lo que se conoce como “score” y eleva el nivel de riesgo ante cualquier institución.
Por el contrario, manejar cinco o incluso siete tarjetas no es un problema si se mantiene un uso por debajo del 70%. La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) y los bancos recomiendan dejar libre al menos 30% del crédito total. Eso indica que no el cuentahabiente no necesita financiar su día a día y que se tiene un margen de pago, lo cual mejora el historial.
Entonces, ¿cuántas tarjetas de crédito conviene tener y cómo usarlas a favor?
Esteban Rosas, especialista en finanzas, señala que el número ideal depende de la capacidad de pago y los hábitos de cada persona, según detalla consigna el sitio web El Economista. No es malo contar con varias tarjetas de crédito: lo negativo es utilizarlas sin estrategia o ignorar sus beneficios. Además, conservar la tarjeta más antigua fortalece el historial personal, ya que la antigüedad es un factor clave.
En este sentido, algunos especialistas aconsejan manejar cinco o incluso siete tarjetas, lo que no constituye un problema siempre y cuando se mantenga un uso por debajo del 70%.
En México existen cerca de 50 millones de plásticos, entre bancarios y no bancarios, y más de 19 millones de adultos usan crédito formal. Ante este panorama, la Condusef recomienda usar el crédito sólo dentro del presupuesto, pagar puntualmente, abonar más del mínimo y cancelar las tarjetas que no se utilicen para evitar tentaciones y mantener el control de tus finanzas.











