

Durante noviembre de 2025, los hombres concentraron 70.7% de los retiros totales realizados en las afores, al disponer de MXN $12,280 millones, mientras que las mujeres retiraron MXN$ 5,081 millones, lo que representó 29.3% del total, evidenciando una brecha relevante por género en el uso de los recursos del sistema de ahorro para el retiro, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
Por administradora, XXI Banorte fue la afore donde los hombres realizaron el mayor monto de retiros, con MXN$ 3,190 millones, seguida de Sura, con MXN$ 2,151 millones, y Profuturo, con MXN$ 2,003 millones, concentrando una parte significativa de los recursos retirados por este segmento durante el mes.
En el caso de las mujeres, XXI Banorte también encabezó los retiros, con MXN$ 1,467 millones, seguida de Sura, con MXN$ 813 millones, y Profuturo, con MXN$ 806 millones, manteniendo el mismo orden de administradoras, aunque con montos considerablemente menores frente a los observados entre los hombres.
Desigualdad de género en las Afores
Este comportamiento se dio en un contexto más amplio de desigualdad estructural. A través del documento “El Género en el SAR”, la Consar explicó que la brecha de género se definió como las desigualdades persistentes entre hombres y mujeres, las cuales se manifestaron en diferencias salariales, una distribución inequitativa de recursos y oportunidades, entre otras problemáticas.
La Comisión señaló que esta situación se extendió al ámbito del ahorro para el retiro, lo que derivó en una brecha de género en las pensiones.
“Este es un problema generalizado que implica que las mujeres, en promedio, gozaron de una seguridad financiera significativamente inferior a la de los hombres durante su vejez”, destacó la Consar.
Asimismo, el organismo regulador explicó que, dado que las mujeres presentaron una esperanza de vida superior a la de los hombres, en promedio su periodo de jubilación fue más prolongado, lo que incrementó la presión sobre los recursos acumulados en sus cuentas individuales.
Ante este panorama, la Consar subrayó que visibilizar y medir las brechas representó “el primer paso indispensable para impulsar la equidad”, en un sistema en el que las diferencias por género continuaron reflejándose tanto en los montos de ahorro como en los retiros realizados.
















