

El Servicio de Administración Tributaria (SAT)alertó a los clientes bancarios que es posible que vean congeladas sus cuentas bancarias de contribuyentes con adeudos fiscales, lo que afectaría a todas las entidades bancarias en México. Las autoridades buscan poder realizar el cobro de impuestos atrasados y presiona a los contribuyentes a regularizar su situación fiscal.
Cualquier cuenta bancaria puede congelarse y esto aplicará a todas las cuentas a nombre del contribuyente, sin importar el banco. Esto sucede por el incumplimiento de obligaciones fiscales como la omisión en el pago de impuestos, la falta de presentación de declaraciones o el desinterés ante notificaciones oficiales. El SAT puede bloquear transacciones bancarias como medida de apremio, incluso si el monto de la deuda no ha sido aún impugnado.
Cuentas bancarias congeladas: por qué sucede y qué se debe hacer
De acuerdo a lo estipulado por el Código Fiscal de la Federación, el SAT puede congelar cuentas por las siguientes razones:
- Falta de pago de impuestos dentro del plazo establecido.
- Omisión de declaraciones fiscales, ya sean mensuales o anuales.
- Créditos fiscales firmes, es decir, deudas ya determinadas legalmente.
- Incumplimiento de requerimientos oficiales para entregar documentación o atender auditorías.
Si se congela una cuenta, el contribuyente tiene derecho a ser notificado y puede solicitar aclaraciones o presentar pruebas para defender su situación fiscal. También se puede apelar a diversos recursos legales, tales como los amparos.

Las autoridades afirman que regularizar inmediatamente cualquier situación pendiente es la mejor manera de prevenir el congelamiento. A esto se pueden sumar ciertas garantías legales como:
- Transferencias parciales de fondos
- Hipoteca de bienes
- Títulos de valor
Estas garantías deben cubrir el monto total del adeudo, incluidos recargos y multas. De este modo, es posible evitar el congelamiento definitivo de las cuentas y reactivar las operaciones bancarias sin restricciones.
Ante la duda, lo mejor es siempre contactarse tanto con el banco como con las autoridades pertinentes y buscar asesoría experta para poder evitar problemas legales y fiscales.













