El norte de México está a punto de experimentar una transformación histórica en su sistema de transporte con la llegada del Tren del Norte, un proyecto ferroviario que conectará Saltillo y Nuevo Laredo a velocidades de hasta 200 kilómetros por hora.
Con una extensión de casi 400km, esta obra promete reducir drásticamente los tiempos de viaje y fortalecer el desarrollo industrial y logístico de toda la región fronteriza.
Además de su velocidad récord, el tren busca convertirse en un nuevo motor económico, impulsando empleos, inversiones y turismo en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, tres de los estados más estratégicos del país.
Ruta del Tren del Norte: qué estados recorrerá y qué tan rápido irá
El Tren del Norte recorrerá 396 kilómetros desde Saltillo hasta Nuevo Laredo, atravesando tres estados estratégicos del noreste mexicano. De acuerdo con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), la obra ya cuenta con más del 70 % del derecho de vía liberado y todos los tramos han sido licitados.

Los trenes alcanzarán velocidades de entre 160 y 200 km/h, lo que permitirá cubrir el trayecto completo en aproximadamente 3.5 horas.
En el caso del tramo Monterrey–Nuevo Laredo, el tiempo de viaje se reducirá a menos de dos horas, consolidando un eje clave para la movilidad de pasajeros y mercancías.
El diseño incluye vías exclusivas para el servicio de pasajeros y estaciones ubicadas en puntos estratégicos, con el objetivo de conectar tanto áreas urbanas como localidades intermedias a lo largo del corredor.
Cuando estará listo el Tren del Norte y qué beneficios traerá
El Tren del Norte forma parte de la estrategia nacional para fortalecer la conectividad y el desarrollo industrial del país. Con una demanda estimada de siete millones de pasajeros al año, el corredor beneficiará tanto al transporte de personas como al comercio con Estados Unidos.
Según la SICT, el proyecto podría estar listo a finales de 2027, una vez concluidas las obras principales y las pruebas de operación.
El reto será mantener el ritmo de construcción, asegurar la inversión y cumplir con los estándares internacionales de seguridad y velocidad.
De concretarse en tiempo y forma, el Tren del Norte marcará un antes y un después en la movilidad ferroviaria mexicana, acercando al país al modelo de trenes rápidos que ya funcionan en otras partes del mundo.















